Omar Martí­n Arboláez
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15 Octubre 2015

Mucho de la tenacidad y el trabajo, dedicado y minucioso del periodista e investigador villaclareño Luis Machado Ordext, se ha transmitido a su peña La Voz del Otro, que el próximo 20 de octubre cumple su primera década de fundada, en su sede habitual, la Casa de la UPEC.

En esta ocasión el encuentro reunió a los poetas Pedro Llanes y Luis Pérez de Castro, en un debate que focalizó la situación de la cultura cubana actual y sus desafí­os, en medio de la vigente pérdida de valores y la crisis de la lectura provocada por el facilismo y el exceso de información de las tecnologí­as contemporáneas, señaló Machado Ordext.

Peña La Voz del Otro, Santa ClaraDiez años después de su fundación, la peña La Voz del Otro, conducida por el escritor y periodista villaclareño Luis Machado Ordext, se mantiene como uno de los espacios de debate y reflexión más constantes e intensivos de la cultura en Santa Clara. (Fotos: Manuel de Feria)

En este sentido, la resonancia de Ernesto Guevara en una ciudad como Santa Clara no pudo pasar desapercibida por Pérez de Castro, quien ha dedicado parte de su producción escrita al Guerrillero Heroico. El poeta abogó por la salvaguarda de la impronta del Che en la cubaní­a, y el estudio profundo de su pensamiento económico y polí­tico. Es necesario retomar incluso su poética, compilar sus versos, sus cartas de amor, sus intervenciones, enfatizó.

De ahí­ que rescatar lo genuinamente humano del gigante argentino ocupara buena parte de la conversación entre los escritores convocados y la audiencia, entre los cuales se encontraban nombres como el de Aldo Isidrón del Valle, Premio Nacional de Periodismo José Martí­. El debate fue propicio entonces para rememorar.

Precisamente para Luis Machado Ordext: «la idea de La Voz del Otro es potenciar el debate del público con las ideas teóricas que exponen nuestros invitados, interpelar a ese otro que no tiene voz para que dé su testimonio ». Este ha sido el propósito manifiesto de un proyecto que durante diez años ha sabido mantenerse como único de su tipo en el paí­s, en tanto espacio para la comunicación de las experiencias teóricas y prácticas de escritores y periodistas en busca de una superación cultural, «sin segmentaciones profesionales, y desde la pluralidad de criterios y el diálogo », remarcó.

Entre poemas leí­dos e intensas reflexiones, La Voz del Otro demuestra una vez más su capacidad para favorecer el encuentro con la cultura nacional, al ser un espacio de confrontación de nociones y experiencias, en un contexto donde otros proyectos similares han sido abandonados por sus propios creadores.

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