San Juan de los Remedios, la Octava Villa de Cuba, feudo particular desde antes de 1515 de Vasco Porcallo de Figueroa, el conquistador español, hizo este martes su ruta hacia el medio milenio, ocasión en la cual festejó el aniversario 499 de existencia con rango de pueblo y de organización administrativa-religiosa en su vasta demarcación original.
Con el acontecimiento se emprenderá un programa de acciones de conservación, mantenimiento y desarrollo urbanístico de una localidad, distinguida como Monumento Nacional. En el patrimonio destacan exclusividades de rango universal, principalmente en la arquitectura de la Parroquial Mayor, los inmuebles aledaños, así como las fastuosas parrandas, o el repertorio musical de Alejandro García Caturla, un jurista-compositor de inapreciable trascendencia.
También, como en otras ocasiones, dejará el camino expedito a investigaciones históricas que determinen la fecha exacta de la fundación, así como el lugar preciso que ocupó esa territorio en el concierto relativo a aquellos siete primeros asentamientos primitivos surgidos con la conquista española propuesta a comienzos del siglo XVI por el Adelantado Diego Velázquez.
Habrá que seguir las huellas de aquellas historias que recreó en sus investigaciones Rafael Farto Muñiz, cuando comentó que en mayo de 1513, «llegan esos hombres al poblado de sabana », también nombrado Sabaneque o Cavaneque, cacicazgo de aborigen, para explorar parte de la isla y poblarla, a 25 leguas del río de Caonao. Fue el instante en que Velázquez estuvo «viendo y calando la tierra de las provincias subjetas a la de Camagí¼ey y parte de la de Guamuahaya », presumiblemente un lugar próximo al actual Remedios.
Como los «nísperos mejor del mundo », de los que habló en el siglo antepasado el costumbrista español-remediano Facundo Ramos y Ramos para consignar una parte tangible e insustituible de su comarca adoptiva, la Octava Villa, en el Día del San Juan, glorificó en una Asamblea Solemne que marcó el nacimiento del año 499. De igual modo, en ese cónclave se recabó a los moradores la necesidad de perpetuar una continuidad histórica que fomente, como aquel fruto carnoso, un instante de enriquecimiento cultural.
Un repaso a la significación, con sus antecedentes y perspectivas, precisó Humberto ílvarez Luis, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular, al recordar a personalidades e instituciones que, de un modo u otro, decantan los valores culturales e históricos de Remedios en el panorama artístico-literario y social del país, o fuera de sus fronteras naturales, y el concepto de "patria chica" que prima en los nacidos en esas ubérrimas tierras de antaño.
ílvarez Luis detalló, cómo en la actualidad más de 40 obras de incidencias económico-sociales se acometen en Remedios y sus territorios cercanos, entre las que descuellan un programa inversionista que incluye instalaciones deportivas, educacionales, culturales y vinculadas con el fomento y desarrollo del turismo, así como el rescate de edificaciones patrimoniales de repercusión en la idiosincrasia de los lugareños.
Tal será el caso del hotel Camino del Príncipe, que en septiembre arrancará en su readecuación arquitectónica, y que se adicionará en lo perspectivo a las homólogas Mascotte y Barcelona, insignias estatales que ahora facilitan la explotación de las capacidades de alojamiento turístico.
Durante la ceremonia la pedagoga Máxima Adela Reguera Peña, y el galeno Mariano Seigle Rebollar recibieron la distinción de Hijos Ilustres de Remedios, mientras Fidel Galbán Ramírez, fue declarado Adoptivo, dadas las contribuciones personales al desarrollo cultural de la antigua jurisdicción, ahora municipalidad, y de las cuales jamás podrá prescindirse en su mención histórica cubana.
La Asamblea Solemne efectuada en el vetusto teatro Villena, en Remedios, examinó las labores de hombres y mujeres que durante más de una década tienen vínculos directos con el pueblo en calidad de Delegados de Circunscripciones del Poder Popular, y entregó diplomas a directivos de entidades económico-sociales de la localidad, comprometidas con las transformaciones que se anuncian para la bienvenida al medio milenio, el año entrante.
En medio de los juegos tradicionales, previos e inclusos en el Día del San Juan Remediano, hubo aquí la captura del gí¼ije por los siete Juanes, la peseta en la sartén, carreras en saco y el palo encebado, entre otras, Esas son particulares de uno de los territorios con mayores mitos, leyendas e historias populares que, desde la oralidad hasta su arquitectura, comentan sobre las peripecias de la Llorona de la calle La Mar, los fantasmas de la ermita, la gí¼ira de Juana Márquez. Todas refuerzan un rico patrimonio cultural en el país.
De igual modo en la ceremonia hubo música, ejecutada por la Banda Municipal de Conciertos, y escenificaciones de cuentos infantiles, a cargo del Grupo de Teatro Guiñol. También la familia Manuel Antonio García Rodríguez-Amarelis Rodríguez León, propietarios del Hostal La Estancia (calle Camilo Cienfuegos, entre General Carrillo y José Antonio Peña), acogió el premio que designó a su inmueble con las categorías nacionales de Conservación y Restauración de Monumentos, y la mención de la cátedra Gonzalo de Cárdenas, de arquitectura vernácula de la Oficina del Historiador de la Ciudad de la Habana, distinciones que comprometen a otras entidades privadas a preservar lo propio y auténtico del entorno urbanístico legado en el decurso del tiempo.
El jubileo está abierto, y como dijo Antonio Machado, el poeta español, «se hace camino al andar » para los remedianos, y también en los villareños mancomunados a aquellas primeras villas fundadoras que, en esta región, se enlazan a la historia de Trinidad, primero, y luego a Sancti Spíritus, en tránsito expedito a la historia.