El pinareño Lázaro ílvarez (60 kilogramos) y el camagí¼eyano Julio César La Cruz (81) se convirtieron hoy en trimonarcas del orbe, al imponerse en sus respectivos pleitos en la cartelera final del XVIII Campeonato Mundial de Boxeo que finalizó en Doha, Qatar, con la vuelta de Cuba a la cúspide del pugilismo universal con cuatro fajas, dos presea de plata y una de bronce.
El pinareño Lázaro ílvarez doblegó por nocao técnico al ruso nacionalizado azerí Albert Selimov. (Foto: Tomada de gettyimages)
ílvarez doblegó por nocao técnico al ruso nacionalizado azerí Albert Selimov, oro en la cita de Chicago-2007, después que los jueces le habían dado ventaja a este último en el round inicial.
Esta corona ratificó a la división de los 60 kilos como la más premiada para los cubanos en porfías planetarias, pues sus representantes han obtenido diez títulos.
Por su parte, La Cruz -reconocido como Mejor Boxeador de la AIBA- dominó sin mayores contratiempos por decisión unánime al irlandés Joseph Ward.
Lazarito y Julio César, quienes se habían ajustado el cinturón de campeones anteriormente en los certámenes de 2011 y 2013 registraron sus nombres en la selecta lista de los que se han colgado tres o más metales dorados en la historia de estas lides que comenzaron a desarrollarse en La Habana, en 1974.
La relación la encabeza el guantanamero Félix Savón, único triunfador en seis ocasiones, seguido por el vueltabajero Juan Hernández Sierra, vencedor en cuatro oportunidades, una más que los también criollos Adolfo Horta, Teófilo Stevenson, Roberto Balado, Mario Kindelán y Odlanier Solís.
También se incluyen en el privilegiado grupo el búlgaro Serafín Todorov, el rumano Francisc Vastag y el chino Zou Shiming, exitosos igualmente en un trío de ocasiones.
En la primera final realizada ayer miércoles, la escuadra del profesor Rolando Acebal había conquistado dos medallas de oro por intermedio del jovencito Joahnys Argilagos, quien hizo historia al erigirse en nuestro primer campeón en la división de los 49 kilogramos y Arlen López, quien dominó en los 75 kilos.
Con preseas de plata concluyeron Erislandy Savón (91) aventajado por el gigante ruso Evgeny Tishchenko y Yosbany Veitía, que al ceder hoy en su bronca con el azerí Elvin Mamishada dio al traste con las aspiraciones de la Mayor de Las Antillas de situar por primera vez a un púgil en lo más alto del podio de premiaciones de los 52 kilos, única categoría en la que no ha reinado un cubano en este nivel.
La séptima presea para nuestro país la aportó Yasnier Toledo, que se colgó el bronce en los 64 kilos, su tercer metal en confrontaciones mundialistas.
Así, con ese saldo, de 4-2-1, el boxeo cubano, después de una década sin poder disfrutar el puesto de honor, volvió a la cima del planeta, hecho que no ocurría desde el 2005, en Mianyang, China, donde sus representantes archivaron 4-1-3.
Aparte de la delegación del Verde Caimán, consiguieron acariciar algún título las escuadras de Rusia (2), Azerbaiyán, Francia y Marruecos e Irlanda, estas dos últimas con sus primeras coronas en torneos del orbe.