Nadie duda de que en cuestión de buenos cantantes Cuba ha sido privilegiada, aunque también no es menos cierto que los artistas excepcionales por su talento y calidad no salen todos los días de abajo de las piedras. En ese sentido Villa Clara puede enorgullecerse de contar con la nueva voz de Patricia Casañas Villar, una joven intérprete capaz de estremecer al público.
En su corta carrera, poco a po co se ha convertido en una figura reconocida y respetada en el ámbito musical villaclareño. Desde su irrupción en el teatro de la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas (UCLV) con varios premios del Movimiento de Artistas Aficionados hasta su primer concierto en «La Caridad » el pasado diciembre, Patricia ha crecido de manera sólida y convincente.
Graduada de Licenciatura en Derecho, ejerció la profesión durante el servicio social, pero según declaró: «No me pude apartar de lo que realmente amo y considero en mi vida: el canto ».
Sus estudios de Educación Musical en la Escuela Vocacional de Arte Olga Alonso (EVA) le otorgaron la base para su futura carrera. El paso por coros, bajo la guía de la maestra Yolanda Martínez Ordóñez, le ayudó a descubrir sus necesidades artísticas e introducirse en ese mundo.
«Como el nivel medio de la especialidad se estudiaba en La Habana, no pude continuar, además no era mi vocación. Quería cantar, pero en Cuba no existe una escuela de canto popular, sino lírico. Escogí una carrera universitaria, y desde ese ámbito me inserté en el Movimiento de Artistas Aficionados. No podía evitarlo », rememora.
Patricia se hizo profesional con la categoría de Excelencia e integró el catálogo de la Empresa Provincial de la Música y los Espectáculos Rafael Prats, de Villa Clara. Su voz ha sido constantemente reclamada para las más disímiles actividades político-culturales organizadas por organismos y entidades del territorio.
Mas, resulta admirable que dentro de su repertorio no solo incluya canciones patrióticas que en su voz quedan muy bien defendidas, como las icónicas Su nombre es pueblo, compuesta por Eduardo Ramos; Girón, la victoria, de Sara Gon zález, o Por los Andes del orbe, de Tania Castellanos, sino otros grandes temas del tesoro musical cubano e internacional, algunos desconocidos por cantantes experimentados.
En su concierto premier de diciembre, Patricia mostró ante el gran público su dominio y conocimiento de piezas hermosas y a la vez difíciles de interpretar. Digamos Ya no me quieres, de María Greever; En la imaginación, de Marta Valdés; Duele, de Piloto y Vera; Me he quedado sola, de Marta Villa; Tú eres la música que tengo que cantar, Tony Pinelli…
«Son canciones icónicas de la cultura cubana que quisimos rescatar. Y ese término debe usarse con mucho cuidado, porque muchas veces decimos que los jóvenes queremos rescatar la música cubana, pero hay que ser cuidadosos al elegir qué obras. No debemos creer que podemos interpretarlo todo ni llegar a todos los lugares », aclaró.
A Patricia Casañas le queda mucho camino por andar y aprender en el difícil mundo del arte. Consciente de ello, cada día se empeña para alcanzar la consagración de las grandes nacidas en esta Isla. Voz y talento no le faltan, por lo demás, solo cantar, cantar, cantar.