Intervención del primer ministro de la República de Cuba, Manuel Marrero Cruz, mediante videoconferencia, en la Reunión del Consejo Intergubernamental Euroasiático.
Excelentísimo señor Askar Mamin, primer ministro de la República de Kazajstán,
Excelentísimos señores jefes de Gobierno y de delegaciones:
Agradezco la invitación de Kazajstán, actual presidente de la Unión Económica Euroasiática, para participar en este encuentro. Confío, en poder asistir de manera presencial a futuras citas, lo que no ha sido posible en esta oportunidad, dada la situación epidemiológica internacional, creada por la pandemia de la COVID-19. Reconocemos, la labor organizativa de la Comisión Económica Euroasiática, en particular, del Presidente de su Consejo, Mijail Vladímirovich Miasnikovich.
Este Consejo Intergubernamental, tiene especial significado para Cuba, al participar por primera vez, en condición de Estado Observador, ante la Unión Económica Euroasiática. Este marco es una oportunidad, para ampliar las relaciones de hermandad que hemos construido, con los Estados miembros de la Organización, durante los últimos 30 años.
La celebración de este foro, tiene lugar en un contexto internacional complejo. La pandemia de la COVID-19, ha desatado una crisis sistémica de gran envergadura, agravada por guerras comerciales y medidas coercitivas unilaterales, violatorias del Derecho Internacional. Cuba, ha tenido que enfrentar estos retos, en un escenario de recrudecimiento sin precedentes, del bloqueo económico, comercial y financiero, impuesto por el gobierno de los Estados Unidos.
Agradezco, a los Estados miembros de la Unión, su permanente apoyo al reclamo del cese del bloqueo económico que impone Estados Unidos a mi país. La reciente inclusión de Cuba, en la arbitraria y unilateral lista, de Estados patrocinadores del terrorismo, que publica el Departamento de Estado de los Estados Unidos, fue una de las más recientes manifestaciones, de una política hostil, carente de legitimidad y condenada al fracaso. Cuba, rechaza en los términos más enérgicos, esa fraudulenta calificación, y aprecia el respaldo recibido de la comunidad internacional.
Excelencias:
Los devastadores efectos de la COVID-19, evidencian que la solidaridad, el multilateralismo y la cooperación, constituyen la vía más efectiva, para enfrentar los retos comunes. Nuestro país, está comprometido con el avance de los proyectos de integración, que propone la Unión Económica Euroasiática, al tiempo que ponemos, a disposición de los Estados miembros, nuestras capacidades en el enfrentamiento a la COVID-19, particularmente en lo referente a la colaboración médica, biotecnológica y la producción de vacunas.
Asimismo, ratificamos la disposición de colaborar, en la implementación de las directrices estratégicas, para el desarrollo de la integración económica euroasiática hasta el 2025, que se avienen plenamente, con el Plan de Desarrollo Económico y Social de nuestro país hasta el año 2030.
Acogemos con beneplácito, las posibilidades de inserción en las iniciativas euroasiáticas, enfocadas en las esferas energética, industrial, de transporte, turismo, financiera y la eliminación de barreras comerciales. Vemos también con interés, la creación de empresas mixtas y el fomento de la digitalización integral de los sectores productivos, la ampliación del acceso a los mercados exteriores, la colaboración con otras iniciativas regionales, entre ellas la «Franja y la Ruta »; así como la intención, de interconectar los sistemas nacionales de distribución de productos básicos, de los Estados miembros.
La designación de nuestro Embajador ante la Federación de Rusia, Julio Garmendía Peña, como representante permanente ante la Unión Económica Euroasiática, y su interacción con la Comisión Económica Euroasiática, contribuirá a una participación activa de Cuba en los proyectos desarrollados por la Unión.
La República de Cuba, honrará su condición de Estado Observador de la Unión Económica Euroasiática. Tenemos la firme determinación, de sumarnos a sus metas de desarrollo e integración, a partir de nuestras modestas posibilidades, y sinceros esfuerzos. Juntos, tenemos la capacidad de lograr los objetivos económicos y sociales de nuestros países, consolidar la colaboración entre nuestras naciones y garantizar el bienestar y prosperidad de nuestros pueblos.
Muchas gracias.
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