El presidente del país indicó el fortalecimiento de las estructuras de los dos municipios más afectados, Imías y San Antonio del Sur, desde la propia provincia, asimismo consideró una prioridad darle seguimiento a las posibles afectaciones por los escurrimientos de las aguas.
El presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y el primer ministro Manuel Marrero Cruz, se encuentran este miércoles en San Antonio del Sur, donde más duro golpeó el huracán Oscar a Cuba.
Su viaje desde la capital se produce un día después de que el Consejo de Defensa Nacional, reunido ayer, estableciera las principales acciones para atender la emergencia ocasionada en Guantánamo por el evento climatológico.
El presidente del Consejo de Defensa Nacional insistió en que los informes de los Órganos y Grupos se orienten hacia el seguimiento de las acciones aprobadas para su implementación, que incluyen otras que se pudieran incorporar posteriormente a partir de la apreciación de la situación durante los próximos días.
También indicó el fortalecimiento de las estructuras de los dos municipios más afectados, Imías y San Antonio del Sur, desde la propia provincia de Guantánamo, y consideró una prioridad darle seguimiento a las posibles afectaciones por los escurrimientos de las aguas, orientar un estudio medioambiental a partir de las especificidades marcadas por este meteoro, proceder al reforzamiento de la alimentación y la elaboración de alimentos, a partir de lo aprobado en el Consejo de Defensa Nacional extraordinario, indica el reporte publicado por la Presidencia de la República.
En su intervención, llamó a garantizar la correcta organización de las donaciones nacionales e internacionales, por parte de los organismos que correspondan. De la misma manera, solicitó implementar las medidas financieras aprobadas con respecto a bonificaciones y tributos, la distribución de recursos para apoyar el abasto de agua a la población y el levantamiento de las afectaciones en materia de vialidad, teniendo en cuenta las orientaciones del grupo de trabajo correspondiente.
El presidente subrayó la necesidad de identificar bien los recursos para las labores en viviendas afectadas, trabajos en puentes y viales; y ratificó la importancia de mantener la vitalidad de los servicios de salud en cualquier circunstancia.
Asimismo, se refirió al acuerdo aprobado de prolongar el receso de las actividades en algunos sectores hasta el próximo lunes, así como de las docentes.
Consideró una prioridad trabajar aceleradamente en las labores de saneamiento de los territorios. Expuso que se mantendrán los chequeos diarios sobre la marcha de la recuperación tras el paso del meteoro por Guantánamo, y una vez a la semana este se realizará en el territorio oriental.
«Estamos viviendo momentos de contingencia que no son insuperables”, agregó, “todo esto lo estamos haciendo en medio de una política de máxima presión de Estados Unidos, que ha estado acompañada y apoyada por una campaña de intoxicación mediática, tratando de demostrar un estado fallido e incompetente».
«Todos los momentos de la Revolución han sido difíciles y en todos esos momentos los hemos superado, y todos esos momentos también nos dejan un legado de enseñanza, de lecciones, que forman parte del patrimonio político de la nación cubana para enfrentar situaciones como estas».
Dijo que la situación en la que opera el SEN debido a la tensión financiera a que hemos sido sometidos, constituye algo inédito en el mundo, que no se le ha aplicado a nadie en el planeta, algo que denunciamos hace cinco años y se mantiene hasta la actualidad.
Insistió en que los problemas de disponibilidad energética que presenta el país «no son asociados a negligencia, ni ineficiencia, ni abandono, es un tema objetivo que tiene que ver con el bloqueo y su recrudecimiento».
Destacó que el gobierno se centra en gestiones intensas para la búsqueda de suministros de combustibles, buscando el apoyo de países hermanos, y acciones para paliar la afectaciones a la población, con sensibilidad, con preocupación y ocupación, con constancia, sin descanso, y además con valentía, sin derrotismo, con convicción, sin pesimismo ante tanto acoso y perversidad.
Finalmente, reiteró su reconocimiento al pueblo, su capacidad de resistencia y entereza, su comprensión y la defensa de la unidad.
«Esa decisión y disposición de trabajar sin descanso para superar esta situación la ratificamos, con una condición de no rendición, y con una condición también de victoria, que siempre nos acompaña como legado de nuestra Revolución, y así seguiremos en combate», concluyó.