MAISÍ.— Hace tres semanas el huracán Oscar golpeó con saña a la provincia de Guantánamo; y barrió con furia inusitada, enmarañando y anegando paisajes, a los municipios San Antonio del Sur, Imías, Baracoa, y Maisí.
Hubo mucho daño: En San Antonio del Sur las aguas subieron como nunca antes se había visto; Imías llegó a estar totalmente incomunicado; Baracoa sufrió el golpe de las aguas y los vientos; y en Maisí -donde en la mañana de este jueves el presidente del Consejo de Defensa Nacional, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, comenzó su agenda de trabajo- las afectaciones más severas fueron en la agricultura, en el servicio del fluido eléctrico, y en las viviendas.
Esta es la segunda ocasión en la cual el mandatario llega a Maisí tras el paso del huracán Oscar. La primera vez su visita tuvo lugar a pocas horas de que el meteoro hubiese pasado. Y este jueves el poblado Quemado de Sabana, muy húmedo por una lluvia que en la zona no cesa, fue el lugar por el cual llegó el jefe de Estado al municipio más oriental del archipiélago.
Inmediatamente después del arribo del mandatario -quien llegó acompañado del integrante del Buró Político y secretario de Organización del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales Ojeda, así como de las autoridades del territorio-, se produjo un intercambio entre el jefe de Estado y un grupo de pobladores. A ellos preguntó si ya tenían restablecido el servicio de fluido eléctrico; si tenían acceso al agua; y si les habían llegado los alimentos.
«Ahora vamos a trabajar rápidamente en el tema de la vivienda», enunció el presidente del Consejo de Defensa Nacional, quien no pasó por alto que en el territorio hay acumulados problemas del fondo habitacional, los cuales datan del paso de ciclones anteriores como el Matthews.
«Cuando todos nos unimos y empezamos a trabajar juntos, las cosas salen adelante», dijo Díaz-Canel en conversación con los habitantes de la comunidad. Y a ellos también comentó que «los eléctricos han trabajado duro». Esa expresión atiende a que ya el municipio -donde se restablecieron las comunicaciones y el servicio de agua- cuenta con el 99,7 por ciento del servicio de fluido eléctrico restablecido.
«Aquí se ha trabajado mucho y eso tiene que ver con la participación de ustedes», expresó el presidente cubano, quien también explicó que ahora la estrategia es trabajar con los derrumbes parciales o totales de techos, para ir avanzando con agilidad en la recuperación de las viviendas dañadas.
«Irán entrando los recursos, y nos iremos restableciendo», aseguró el jefe de Estado, quien hizo énfasis en la importancia de controlar muy bien esos recursos.
Allí en Sabana, la Oficina de Trámites para damnificados fue el primer recinto visitado por la dirección del país en la mañana de este jueves. Una detallada explicación recibió el mandatario, según la cual han recibido una atención priorizada los casos más críticos, y han sido especialmente tenidos en cuenta los ancianos, los niños, y las personas enfermas.
En la Oficina de Trámites una gran pizarra ofrece números que hablan sobre los recursos disponibles y sobre el apoyo que se va dando a los más urgidos. Trabajadores sociales, profesionales de instituciones como Vivienda, y de sectores como los de Finanzas y el Comercio, se encontraban presentes en un espacio poblado de mesas desde las cuales se atiende a la población.
En Maisí, 995 casas sufrieron afectaciones, se produjeron 22 derrumbes totales, y 84 inmuebles han podido ser recuperados hasta hoy.
La escuela, obras de buen impacto, y un elogio merecido
El siguiente lugar visitado en el municipio de Maisí fue la escuela secundaria básica «Mártires de Punta del Silencio». Antes de llegar -bajo un torrencial aguacero- al aula donde los alumnos estaban recibiendo conocimientos de la asignatura de Física, Díaz-Canel Bermúdez fue recibido en las afueras del centro educativo por un grupo artístico procedente de la provincia de Holguín. A ellos, llegados solidariamente desde sus escenarios cotidianos, el mandatario les dijo que son una suerte de «huracán espiritual».
Una vez en el aula -sobre la cual se instalaron en agosto pasado techos nuevos- el Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista preguntó a los estudiantes si les va bien en el proceso docente educativo. Allí, donde no cesaba la lluvia, una estudiante declamó versos que los cubanos conocen muy bien: son los del poema «Se acabó», de Nicolás Guillén, donde el poeta habla de cómo Martí dibujó, prometió un sueño de Patria, y Fidel lo hizo cumplir.
Siguió el turno, en la agenda de trabajo, al acueducto Maya, el cual fue afectado por las fuerzas del huracán Oscar. Allí el presidente Díaz-Canel pudo constatar que ya fue recuperada la toma de agua que abastece cuatro Consejos Populares de Maisí.
El jefe de Estado indicó comenzar la ejecución de un proyecto que haga posible llevar el agua desde la zona de Yumurí hasta el poblado de Sabana, en un recorrido de unos 12 kilómetros. El diseño de esa tarea ya está hecho, y aunque están haciendo falta algunos recursos para la inversión total, podrían comenzar a darse los primeros pasos en la concreción de la obra.
La comunidad La Lucecita, ubicada en el Consejo Popular La Máquina, fue el siguiente escenario donde el jefe de Estado pudo ver de primera mano el estado de las viviendas allí construidas y que sufrieron la embestida del huracán. En esa visita el mandatario conversó con los pobladores, quienes contaron sobre sus desvelos y preocupaciones cotidianas.
El cierre de la jornada en Maisí fue un encuentro de la dirigencia del país con los miembros del Consejo de Defensa Provincial, así como con los integrantes del Consejo de Defensa en el municipio más oriental de Cuba.
«Ustedes han trabajado duro y han trabajado bien», dijo el presidente cubano a las autoridades territoriales, a quienes también elogió la capacidad de haber tomado decisiones muy propias y oportunas.
Díaz-Canel Bermúdez destacó el ambiente de recuperación y de trabajo -el cual calificó de admirable-, y convocó a seguir haciendo las cosas del modo en que se han venido haciendo en estos días.
Al salir de la reunión, en otro encuentro con el pueblo, el dignatario resaltó la importancia y la fortaleza que emana de la solidaridad; y recordó que la misma debe ser compartida en estas horas, atendiendo a que Cuba ha sido impactada por varios fenómenos de la naturaleza. (Alina Perera Robbio)