Ello permitió, dijo, dar respuesta inmediata a los damnificados con alimentos, recursos para acceder a agua potable, tanques para ese líquido con diferentes capacidades, así como otros artículos destinados a la población.
Recordó que llegó el quinto vuelo de apoyo del sistema de Naciones Unidas que, además, aglutina a otras instituciones, países, organizaciones que contribuyen al mismo.
Pérez-Oliva también subrayó la capacidad de la nación antillana, su gobierno e instituciones para acudir de forma simultánea a la recuperación de eventos climatológicos que ocurrieron en extremos del país.
El titular de Comercio Exterior destacó que pese a la compleja situación económica de Cuba y de un recrudecimiento sin precedentes del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos al país, se han recibido muestras de solidaridad y ayuda concreta de numerosas naciones.
También se recibieron muestras de ayuda de numerosos gobiernos con recursos para el sistema electroenergético, insumos médicos, alimentos, equipos para tratar el agua y grupos de electrógenos de emergencia, enumeró.
Al tiempo de ofrecimientos de empresas extranjeras radicadas en Cuba que disponen de almacenes con mercancías en régimen de depósito de aduana, y entidades foráneas que pusieron sus inventarios en función de la recuperación.
Ello habla de la sensibilidad y la solidaridad de estas empresas que trabajan en el país durante años, apostilló.
Además, destacó la posición y reacción inmediata de inversionistas extranjeros con ofrecimientos de diversa índole, al igual que un sinnúmero de compatriotas en el exterior, así como organizaciones solidarias que realizaron importantes contribuciones como la entrega de 100 plantas eléctricas para dar vitalidad a centros fundamentales.
Precisó que las prioridades de la ayuda solidaria recibida es aquella que impacte en la recuperación del sistema electrométrico nacional, alimentos y agua seguros para garantizar el abastecimiento a esta población afectada.
Hasta el momento se han recibido importantes cantidades de colchones, cocinas, medios para la recuperación de la vivienda, insumos médicos y medicamentos, así como recursos para atender a los niños en las zonas afectadas, concluyó. (lam/tdd)