Un único color en el espíritu de Cuba

De cuánto se ha avanzado y cuánto falta por hacer para desterrar este flagelo se estará discutiendo en la Conferencia Internacional Cuba 2024, Decenio de los Afrodescendientes,  cita en la que participan unos 240 delegados de más de 15 países.

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Baile de una afrodescendiente.
(Foto: Juvenal Balán)
Tomado de la edición digital del periódico Granma
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09 Diciembre 2024

Mestizo fue el nombre que nuestro Poeta Nacional, Nicolás Guillén, le dio al espíritu de Cuba. Autor de hermosísimas páginas en las que el ser humano brilló por encima de prejuicios y siniestras apreciaciones, habló de cocteles y de mezclas, para referirse a la naturaleza de nuestra gente, y en 1931 soñó con que «algún día» en nombre de la verdad, al respecto se diría «color cubano».

En 1959, triunfó una Revolución, encabezada por un apasionado discípulo de Martí que, como él, supo que el hombre es mucho más que el color de su piel, y desde el primer día de su gobierno defendió la voluntad de erradicar el racismo y la discriminación racial, que reinaba en la Cuba en que hasta entonces había vivido. 

Mucho ha llovido desde el 1ro. de enero de 1959, y mucho dolor barrieron esas aguas. «Las políticas públicas de bienestar social tomadas desde entonces tienen un carácter universal y alcanzan a todos los cubanos y las cubanas por igual», ha expresado Julio Rensoli Medina, secretario del grupo coordinador ejecutivo del Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial, Color cubano, quien, además, añade que, incluso cuando se han superado muchas barreras a partir de la igualdad de oportunidades, perviven manifestaciones de prejuicios por el color de la piel.

El mensaje tiene lugar en el contexto de la Conferencia Internacional Cuba 2024, Decenio de los Afrodescendientes, que desde hoy y hasta el 13 de diciembre se celebra en La Habana y Matanzas, convocada por el Programa Nacional contra el racismo y la discriminación racial.

De cuánto se ha avanzado y cuánto falta por hacer para desterrar este flagelo, en Cuba y en el mundo, se estará discutiendo en esta cita en la que participan unos 240 delegados de más de 15 países, y que contempla, junto a espacios de debate, la visita a museos, instituciones y comunidades. Color cubano habrá no solo de decirse, sino de sentirse dentro del corazón. Entre los incontables desafíos que Cuba tiene por delante, ese que nos dicta el poeta, no es menor ni está aplazado. (Madeleine Sautié)

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