En la raíz de Cuba y Latinoamérica, una Cajobabo y un 11 de abril

Raíz que se hizo árbol y creció, hasta renacer en el más anhelado de los frutos: la libertad que desembarca como legado de una generación a otra.

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Vanguardia - Villa Clara - Cuba
(Foto: Adriel Bosch Cascaret)
Tomado de la edición digital del periódico Granma
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11 Abril 2025

En la nocturnidad de hace 130 años, después de la arremetida independentista extendida por un decenio, dejado atrás el exilio, la patria y un puñado de hijos se reencontraron en Playita de Cajobabo. Desde estas arenas irrumpía una luz para Cuba y Latinoamérica.

José Martí y Máximo Gómez al frente del desembarco, junto a Maceo, liderarían la Revolución que, iniciada 27 años atrás en La Demajagua, había dejado inconcluso el encargo independentista de la Isla, sin haber desaparecido las causas de origen.

Por más que persistiera España aferrada a su colonial dominio, a esas alturas se sabía condenada al fracaso, en tanto incapaz de frenar el insurreccional empuje de los cubanos. Ya para entonces, una sombra imperial –la misma que todavía nos acecha– planeaba sobre nuestro pueblo y los hermanos del área; era ese el peligro mayor.  

En la patria grande y en la nuestra pensaba Martí cuando se dispuso a organizar la Guerra Necesaria, destinada a «impedir a tiempo con la independencia de Cuba, que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos, y caigan con esa fuerza más sobre nuestras tierras de América».

Nada lo detuvo en su patriótico empeño. La mirada amenazante de la bestia imperial, lejos de intimidar, fermentó la resolución de lucha de los cubanos, bajo la guía de Martí. La pelea fue dura e intensa, pero nos hizo un pueblo libre y sin dueño, y esa elección desbordó la isla.

Latinoamérica es una ruta, y Cajobabo tiene en ella su trascendencia especial. Desde aquella noche de abril de 1895 dejó de ser únicamente un sitio, por las mismas razones que desde entonces el 11 de abril es mucho más que una fecha.

Porque allí, y entonces, emergió pujante y unida una determinación, un espíritu más firme y resuelto cuando mayor fue el peligro para Cuba y la América hermana.

Cajobabo y abril regresarán en ejemplo y espíritu, en cualquier parte y momento, como en la ix cumbre de la Celac, en Honduras, esta vez para hacerle frente a «la distorsión oportunista de la historia y de la realidad» denunciada por Díaz-Canel, frente al «declarado retorno a la Doctrina Monroe», que «solo puede ser enfrentado con unidad». (José Llamos Camejo)

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