XX Cumbre ALBA-TCP en La Habana: Por la solidaridad y la unidad
En sus intervenciones en la XX Cumbre ALBA-TCP, los representantes de los países miembros ratificaron su apoyo al bloque regional y abogaron por el incremento de la cooperación, en temas como el enfrentamiento a la COVID-19 y el cambio climático.
Con las palabras de apertura del primer secretario del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, inició en La Habana este 14 de diciembre la XX Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP).
La cita se realiza, justamente, cuando se cumplen 17 años de la fundación de este bloque, creado por los comandantes Fidel Castro Ruz, de Cuba, y Hugo Chávez Frías, de Venezuela, el 14 de diciembre de 2004.
En su intervención inicial, el mandatario cubano celebró las victorias en los recientes procesos electorales de Venezuela y Nicaragua, y destacó la resistencia del pueblo de Bolivia ante los intentos golpistas.
Díaz-Canel significó, además, la manera en que los miembros del ALBA-TCP compartieron recursos y experiencias para enfrentar el azote de la COVID-19 en la región. Igualmente, agradeció el apoyo a Cuba en los momentos más críticos de la pandemia y ante el reforzamiento del bloqueo de los Estados Unidos.
Tras hacer un llamado a seguir fortaleciendo la unidad y la integración, y el respeto de América Latina y el Caribe como zona de paz, evocó la lucha de Fidel y Chávez y para lograr la integración, y expresó: «Sus humildes seguidores, sus leales discípulos, tenemos el deber y el honor de impulsar y fortalecer esa obra magnífica ».
Inaugurada la Cumbre, el primer representante de las naciones miembros que hizo uso de la palabra fue el presidente venezolano Nicolás Maduro.
La intervención inició con un saludo al General de Ejército Raúl Castro Ruz.
Al referirse a la fundación del ALBA, hace 17 años, destacó que el 14 de diciembre de 2004 se cumplían diez del primer encuentro entre Fidel y Chávez.
Sobre el organismo multilateral creado por estas dos grandes figuras mundiales, consideró que es la casa de la unión, de los iguales, la casa de los sueños grandes. A la vez, llamó a fortalecer la ALBA-TCP como espacio común al máximo nivel.
«Si ha sido gloriosa esta etapa de 17 primeros años, que demostraron que sí es posible otro camino, donde juntos podemos ir a la acción común frente a nuestros pueblos, hay que dar un paso más adelante y ese es el llamado que Venezuela ratifica ».
Puntualizó la necesidad de reforzar los lazos económicos y darle fuerza y contenido a todo lo que ya está creado.
Como otro tema central para el organismo en esta etapa pospandemia, citó a la Salud. Al respecto subrayó la capacidad científica de Cuba por la creación de cinco vacunas contra la COVID-19.
En otro momento de su intervención, Maduro denunció las medidas coercitivas unilaterales y las campañas desestabilizadoras y de descrédito por parte de EE. UU. contra algunos países miembros de la Alianza como Nicaragua, Venezuela, Bolivia y Cuba.
Daniel Ortega Saavedra, presidente de Nicaragua, elogió que el ALBA-TCP, como mecanismo de concertación ha sabido crear y aportar desde la resistencia ante las agresiones del imperialismo.
Calificó de pandemia al capitalismo salvaje y el imperialismo que destruye naciones y provoca el caos, desintegrando a los estados.
«Si en algo se caracteriza el imperialismo es en ser más mentiroso porque predican la paz y practican la guerra, el terrorismo », apuntó.
Al igual que el mandatario venezolano, se abordó la situación de Bolivia, país cuyo pueblo ha reivindicado sus derechos y al que el imperialismo quiere nuevamente poner las cadenas.
Sobre su nación, enfatizó que los intentos de Estados Unidos de apoderarse de Nicaragua se remontan a la ocupación iniciada en 1854 por las tropas de William Walker, quien llegó a ser reconocido por el mandatario norteamericano de la época (Franklin Pierce) como presidente de ese territorio centroamericano.
«De ahí viene el sentimiento antiimperialista de Nicaragua, no de la Unión Soviética », comentó.
Ortega también llamó la atención sobre el caso Julian Assange, injustamente encarcelado por denunciar los crímenes del imperio, y a quien Estados Unidos intenta extraditar.
Sobre el ALBA recalcó que es un paso de valentía frente al imperialismo. Una agrupación que no se han planteado formar un ejército ni planear acciones militares, sino que propuso integración y unidad para mejorar las condiciones de nuestros pueblos. «Un programa de justicia, de amor al prójimo », sentenció.
Luis Arce, presidente de Bolivia, agradeció la solidaridad del pueblo y Gobierno cubanos, en nombre del pueblo boliviano y los movimientos populares de su país «Gracias por ese faro moral », dijo.
Explicó que deseaba venir a Cuba para pedir perdón a los profesionales cubanos de la Salud por los maltratos recibidos durante el golpe de Estado contra el gobierno legítimo de Evo Morales.
Destacó la importancia del acompañamiento de las naciones progresistas, para que su nación pueda seguir avanzando.
Al valorar el actual contexto de la pandemia de COVID-19 , denunció la mercantilización de las vacunas por parte del capitalismo, y propuso que las transnacionales compartan patentes y conocimientos.
Sobre lo que en materia de integración puede hacer el ALBA, mencionó como prioridades la generación y producción de medicamentos con base en la medicina natural y tradicional, y las acciones para garantizar la seguridad alimentaria de los pueblos.
«Con salud y alimentos podemos seguir avanzando », afirmó y puso a disposición de la secretaría técnica todo lo que pueda aportar Bolivia en estos objetivos.
Ralph Gonsalves, primer ministro de San Vicente y las Granadinas, agradeció el apoyo humanitario de los miembros del ALBA-TPC a su país tras la erupción del volcán La Soufrií¨re.
Al referirse al enfrentamiento de la pandemia, destacó la importancia de las campañas de inmunización, y reiteró la confianza en las vacunas cubanas anti-COVID-19.
Sobre el plan de trabajo del bloque para la recuperación pospandemia destacó, entre sus seis pilares básicos, la seguridad alimentaria, la garantía de la comunicación y la transportación.
Pidió añadir a los documentos de la XX Cumbre dos aspectos básicos: el derecho a la memoria y la consolidación de la solidaridad.
Entre los desafíos para sostener la soberanía y la independencia de los pueblos de la región, mencionó las relaciones con los Estados Unidos, país que sostiene una guerra contra Cuba, Nicaragua, Venezuela y las fuerzas progresistas de Bolivia. Explicó que hay que encontrar las vías para la relación, principalmente, con el pueblo estadounidense, con el objetivo de visualizar dónde se pueden encontrar los puentes de comunicantes con ese gobierno.
El primer ministro de Granda, Keith Mitchell, expresó el honor que significa representar a su pueblo en esta XX Cumbre, y evocó las palabras de Fidel cuando en la década del 80 le dijo que era hombre muy valiente por llegar en Cuba en un momento tan complejo.
Agradeció, además, la ayuda de Cuba y Venezuela a su país para el enfrentamiento a COVID-19, la solidaridad recibida en momentos de desastres naturales.
Mitchell ratificó el compromiso de su país con los principios del ALBA. A propósito, reiteró la necesidad de fortalecer la cooperación y la integración, para lograr los beneficios económicos para los pueblos del bloque.
Como uno de los desafíos de las naciones caribeñas, señaló la unidad y la protección de los ecosistemas.
El primer ministro granadino instó a levantar el bloqueo de Estados Unidos contra Cuba, y denunció la inclusión de la mayor de las Antillas en la lista de países que patrocinan el terrorismo.
En la lucha por el desarrollo sostenible de sus pueblos, señaló que la cooperación y la solidaridad deben ser pilares del ALBA-TCP.
Con una evocación a Fidel Castro y Hugo Chávez, padres fundadores del ALBA-TCP, inició la intervención del primer ministro de Dominica, Jan Douglas.
Como ejemplo de los beneficios de este mecanismo concertador, mencionó la ayuda recibida tras el paso del huracán María, y destacó el envío por Cuba de profesionales de la Salud.
Como parte de la labor médica cubana en esa isla, mencionó la Operación Milagro, que ha devuelto la vista miles de dominicos, y la donación a su país de una unidad de cuidados intensivos.
«Hoy nuestros retos sociales y económicos como región son enormes y solo la unidad y la cooperación nos podrá dar la supervivencia », afirmó, luego de agradecer los gestos de solidaridad del bloque regional hacia su pueblo.
Ante la subversión interna que se promueve en nuestras naciones, significó la necesaria unidad, para contrarrestar la embestida imperial que llega al poder con golpes de estado parlamentarios.
Concluyó con una exhortación a continuar trabajando para cumplir con los sueños de los padres fundadores, y nombre del pueblo dominico dio las gracias por los beneficios del ALBA-TCP.
En el cierre de la jornada matutina, Dean Jonas, ministro de Transformación Social, Desarrollo de Recursos Humanos y Economía Azul de Antigua y Barbuda, manifestó el total respaldo de su país a la declaración de la XX Cumbre ALBA-TCP.
Expresó que es preciso el trabajo conjunto para lidiar con el cambio climático, y señaló que ante la profundización de las diferencias originada por la pandemia, es momento de crear nuevas ideas de cooperación mutua.
Es necesario trabajar en conjunto para lidiar con el cambio climático, dijo, y sobre el tema precisó que nuestra supervivencia climática necesita que trabajemos de forma más comprometida en este sentido.
Destacó que la pandemia ha profundizado las diferencias que ya existían y que es momento para crear nuevas ideas de cooperación mutua. Ratificó los peligros que corren las pequeñas naciones insulares.
Jonas ratificó la confianza en que el ALBA ayudará a nuestros pueblos a construir sociedades mucho más sostenibles.
Su país se sumó a la condena por la aplicación de medidas coercitivas contra Venezuela y Nicaragua y rechazó que la ayuda médica que brinda Cuba se califique como trata de personas.
Al respecto, agradeció la intervención de la Brigada Henry Reeve para contener la pandemia de COVID-19 en Antigua y Barbuda. Sobre el control de la pandemia, subrayó: «Nosotros necesitamos las vacunas cubanas ».
«Santa Lucía siempre está dispuesta a participar en las organizaciones confiables », afirmó Alva Baptiste, canciller de Santa Lucía, y aseguró que su pueblo ha sido uno de los principales beneficiarios del mecanismo integracionista del ALBA-TCP.
Consideró que los países de la región deben continuar fortaleciéndose en pos del desarrollo social del país junto a este bloque multilateral, al cual su país regresó tras cinco años.
Como muestras de esos beneficios mencionó los más de 10 000 pacientes beneficiados con intervenciones oftalmológicas, y la brigada que médica que brinda servicios en esa nación de las Antillas menores.
El ministro de Exteriores destacó, además, la llegada de las vacunas cubanas anti-COVID-19.
Asimismo, aseveró que el marco de solución colectiva que plantea este mecanismo, debe mantenerse ante problemáticas como el cambio climático y los daños al medio ambiente.
Tras reconocer los logros del bloque regional en elevar el nivel educacional de la población, llevar salud, y mitigar los efectos del hambre, expresó: «El ALBA-TCP debe continuar porque ella dará nuevos mecanismos renovadores ».
«Todo lo que queda por decir es que la lucha continua. ¡Hasta la victoria Siempre! », concluyó.
Vance Amory, embajador de la Federación de San Cristóbal y Nieves, agradeció a Cuba y Venezuela el apoyo para garantizar la salud de su pueblo durante la pandemia de COVID-19.
Recalcó que el ALBA ha prestado sus servicios en sectores esenciales como Salud, Cultura, TICs, entre otros, lo que ha sido vital teniendo en cuenta que San Cristóbal y Nieves es una pequeña nación en desarrollo.
Celebró los principios que el ALBA continúa promoviendo como la igualdad y la justicia entre todos los pueblos de la región y manifestó que debe continuar trabajando en garantizar bienestar de estos.
Amory instó a las instituciones financiaras que imponen políticas económicas a que las levanten pues solo limitan el desarrollo de los países.
Ratificó la declaración de América Latina y el Caribe como Zona de Paz y reiteró que su Gobierno continuará apoyando las políticas enfocadas en el pueblo y seguirá siendo un fiel defensor del ALBA.
Sacha Llorenti, secretario ejecutivo del ALBA-TCP, presentó el Plan 2022 y recordó los principios fundacionales de este bloque referidos a reestructurar el ALBA-TCP con otras organizaciones internacionales principalmente de ífrica, Asia y Europa.
Habló de una agenda común sobre la base del respeto a la soberanía y la autodeterminación, la solución a los problemas sanitarios y los efectos de la pandemia, la garantía de la seguridad alimentaria y la democratización del agua.
Se hará un gran énfasis en la agenda económica a través de una serie de acciones para construir un plan integral financiero y monetario, dijo.
Se pidió establecer las prioridades de la Alianza y celebrar varios encuentros el próximo año, principalmente, referidos a los bancos creados para el financiamiento de los proyectos y para garantizar las vacunas.
Se pidió evaluar la posibilidad del Sucre, y otras criptomonedas para las relaciones comerciales entre los países miembros.
La eliminación del bloqueo hacia los países más vulnerables y el que enfrenta Cuba hace más de 60 años, fue otro de los puntos medulares.
Se habló del relanzamiento de Petrocaribe y de las misiones sociales y se pidió una nueva convocatoria a un foro social y continuar el trabajo en la política comunicacional y del ALBA cultural.
Se insistió en el fortalecimiento del escenario político con la reunión de cancilleres y la coordinación de las fuerzas políticas de nuestras alianzas; en reactivar el programa de ALBA Salud y de Agricultura.
Se abordó la creación de un observatorio contra la injerencia para identificar cómo se distribuye el dinero del imperialismo para destruir los procesos democráticos de la región.
Sacha Llorenti concluyó sus palabras recordando el concepto de Revolución de Fidel y aseguró que seremos leales siempre, traidores nunca.
Durante la conclusión del encuentro el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, explicó que se sostuvieron profundos debates y quedó aprobada por todos los participantes la declaración final.
Díaz-Canel añadió los temas fundamentales analizados durante el encuentro:
-Se ratificó la necesidad de valorar y fortalecer nuestro espacio que es el ALBA.
-Se recordó que el ALBA es la alternativa contra los acuerdos del nuevo colonialismo económico.
-El ALBA es nuestro espacio y es nuestra casa, afirmó el Primer Secretario del Partido.
-Se llamó a cumplir un programa para la acción conjunta y dar la máxima importancia estratégica a los verdaderos mecanismos de la unión, confirmando que el tema de la Salud es vital.
-Se denunciaron los intentos del imperialismo que siembra divisiones y la aplicación de medidas unilaterales.
-Se exhortó a avanzar aprovechando aún más el Banco del ALBA y produciendo alimentos.
-Se denunciaron las maniobras de intervención que en nombre de la democracia provocan el caos.
-Se denunciaron las causas de la migración internacional.
-Se denunció el terrorismo de Estado.
-Se denunciaron las mentiras del imperialismo que predica la paz y practica la guerra.
-Se resumieron los más de 100 años de intervenciones del imperialismo en Nicaragua.
-Se agradeció el aporte de Cuba en la asistencia sanitaria.
-Se llamó al diseño de una estrategia pos-COVID-19 enfocado en la biotecnología y en el impulso económico con el apoyo del Banco del ALBA.
-Se debe garantizar la producción de la cantidad de fármacos necesarios y de alimentos.
-Se denunció el neoproteccionismo selectivo.
-Se destacó el apoyo solidario del ALBA ante desastres naturales.
-Se aseguró que no debe haber asunto alguno que intervenga en las relaciones entre los miembros del ALBA.
-Se reconoció el impacto de la solidaridad para enfrentar la recuperación.
-Se rechazó la inclusión de Cuba en la lista de países que patrocinan el terrorismo y el bloqueo estadounidense contra la Isla.
-Se exhortó a trabajar en conjunto para enfrentar los efectos del cambio climático.
-Se denunció la desigual distribución de vacunas.
-Se reiteró la disposición a continuar colaborando con los países del ALBA.