La segunda fecha de competencias de la Copa Cuba 2019 vio coronarse a la estelar Yarisley Silva en el salto con pértiga y a la guantanamera Mailen Brooks en el lanzamiento de la jabalina.
A Silva se le vio segura en el concurso matutino del salto con pértiga. Su motivación y la del colectivo técnico que le acompaña era certificar la marca clasificatoria para el próximo Mundial en Doha, Qatar. La pinareña saltó sin contratiempos hasta los 4.56 metros en su segunda oportunidad.
Luego consumió sus tres intentos en los 4.61 metros, pero no pudo concretar la altura. Con este resultado, la vueltabajera logra su mejor registro del año, al superar los 4.40 metros que había certificado durante la reciente gira invernal, donde intervino en tres competencias.
En declaraciones a la prensa, la subcampeona olímpica de Londres dijo que “he aprendido con el tiempo a competir así, de esta manera, donde el rival es uno mismo. Lo importante es que ya se ven los frutos en las chicas que van surgiendo y se espera una continuidad de los resultados que yo he alcanzado. Solo queda exigirme en los entrenamientos y entregarme al máximoâ€.
Yarisley recordó que “es una temporada larga y ahora mismo no podemos decir cuánto estaremos saltando. Es año de mundial, Juegos Panamericanos y los compromisos de la Liga del Diamante y como vieron hoy pude ratificar la marca del mundial que era el objetivo principal de competir en la Copa Cuba. Solo nos queda esperar el desenlace de la temporada. Aún es muy temprano, solo estamos en marzo y las principales figuras de la especialidad aún no han competidoâ€.
Además de Silva, en el podio se ubicaron la santiaguera Aslín Quiala y la holguinera Rosaidi Robles, con 4.10 metros. Hace apenas una semana Robles quebró el primado nacional de la categoría juvenil al saltar 4.21 metros, en poder de Yarisley Silva desde 2006.
En la jabalina femenina hubo una gran disputa y el duelo enfrentado por las chicas entrenadas por Xiomara Rivero se decidió en los últimos lanzamientos.
Mailen Brooks marchaba tercera en la final hasta que en su quinto intento acabó con el favoritismo de la granmense Yulenmis Aguilar, al lanzar el dardo hasta los 55.62 metros. En la cuarta ronda Aguilar había pasado a comandar la final con un disparo de 53.68 metros, para responder a los 52.74 metros de la joven espirituana Melissa Hernández.
A pesar de no ser una competencia con marcas relevantes, se pudo apreciar rivalidad entre las principales atletas de la especialidad.