Lamentablemente el béisbol cubano vuelve a vestirse de luto con la muerte del santiaguero Ramón Hechavarría Yate este miércoles 8 de septiembre. Apodado el Chava, fue uno de los tres mejores receptores de la primera década de nuestras series nacionales junto a los también desaparecidos Ricardo Lazo González y Lázaro Pérez Agramonte, quien estuvo más tiempo con la selección cubana hasta el mundial de 1976.
Un cáncer puso fin a la vida de este destacado jugador, que había nacido en la actual provincia de Santiago de Cuba, el 24 de agosto de 1938.
En nuestra opinión del Chava no se habló todo lo que merecía a nivel nacional; sin embargo fue protagonista de algunos hechos por los cuales habrá que recordarlo. Fue detrás de Raúl Reyes, Elpidio Mancebo y Agustín Marquetti el cuarto jugador en botar tres pelotas en un desafío.
De esa manera, vistiendo el uniforme de Mineros, Ramón Hechavarría se convirtió en el primer receptor en conectar tres bambinazos en un choque, hecho que logró a costa de los lanzadores de La Habana, el 23 de marzo de 1969.
Con Hechavarría se da también otro hecho singular cuando en la V Serie Nacional (1966) el mentor de Orientales, Roberto Ledo fue suspendido y Chava tuvo que asumir la doble función de director-jugador.
Fundador de las series nacionales, en 1962, fue uno de los tres últimos pioneros de los campeonatos cubanos que colgó los spikes, esto ocurrió en 1978, cuando ya acumulaba 17 temporadas, en las que promedió 263. Luego se retiraron del béisbol activo Lázaro Pérez, en marzo de 1979 y un mes más tarde, en abril, dijo adiós Owen Blandino, el Gallo de Cabaiguán , el último de los participantes en el torneo fundacional de los certámenes del deporte de las bolas y los strikes, que después de 1962 ha desarrollado 60 versiones.
Internacionalmente asistió a tres campeonatos mundiales: el de la memorable justa de 1969, en la que Gaspar Curro Pérez se erigió como el Héroe de Quisqueya; en el certamen del orbe que vio vestirse ede Héroe de Cartagena a José Antonio Huelga, en 1970, y posteriormente en la cita del planeta que acogió Cuba, en 1971. En los tres casos acompañó al villaclareño Lázaro Pérez como receptor.
Intervino en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de 1962, 1966 y 1970. En los dos primeros formó un binomio con Ricardo Lazo en la custodia del home y en la edición de 1970 fue compañero de Lázaro Pérez. En los Juegos Panamericanos de 1963 compartió la defensa de la receptoría con Ricardo Lazo.
Sin duda, con la partida física de Ramón Hechavarría Yate, el béisbol cubano pierde a una de sus estrellas de la receptoría de la primera década de las series nacionales de pelota.