Jonrón de Yudiel González trae primera victoria de Cuba en el mundial Sub 23

El jonrón de Yudiel González selló la victoria de los cubanos, 2-1, contra Taipéi de China, luego de que en su debut en este campeonato mundial Sub 23, cayeran frente a los anfitriones mexicanos.

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Cuba vence a Taipéi de China con jonrón de Yudiel González.
(Foto: Boris Luis Cabrera/Cubadebate)
Tomado de la edición digital del periódico Granma
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26 Septiembre 2021

Yudiel González puso a volar a toda Cuba en la pelota que sacó de jonrón por el mismo centro del estadio Yaquis, en Obregón, y con ese batazo de más de 400 pies firmó la victoria de la Mayor de las Antillas ante Taipéi de China, en un partido crucial en las aspiraciones de clasificación a la segunda etapa del campeonato mundial de Béisbol Sub 23. Pero, aunque ese fue el momento clave del choque, hay que rendir honores, nuevamente, al picheo de de los caribeños.

Algunos dirán que el desenlace fue fortuito, pero ocurrió porque este es uno de los deportes más bellos que se ha creado, capaz de ser la única disciplina con pelota en la cual el que tiene la esférica no es el que ataca, sino el que defiende; el que para marcar lo que serí­a un gol, una canasta o un punto, en este caso una carrera, hay que recorrer 109 metros; y como si fuera poco, eso solo se concreta si llega al mismo punto desde donde salió con un bate en la mano.

Esas singularidades, sus reglas, incluso las de anotaciones, hacen al béisbol el deporte más rico en el orden táctico. Por eso creo que no es casual el triunfo cubano sobre la disciplinada selección asiática. La escena de la quinta entrada, con dos outs, encontró al pinareño Reynaldo Lazaga en el plato tomando ponche, pero el lanzamiento se escapó, dejando a la bola viva y en juego, y el de Vueltabajo llegó a la inicial. El siguiente turno le correspondió al avileño González para decidir el choque con su demoledor estacazo.

Fí­jense si es grande, irrepetible e impredecible la pelota que el lanzador logra lo que serí­a el tercer out de la entrada con la acción más positiva para su rol y le cuesta el partido; y el siguiente bateador, también con la nota más alta en su función, decide el duelo.

En un campo de juego de béisbol gana el elenco que aproveche todas la opciones que este le da, aunque sea la más pequeña, como ese tercer strike que se le escapó al máscara de Taipéi de China. Sin embargo, en el juego de este sábado, se necesitaba algo más, léase las cualidades de un muchacho como Yudiel González, con fuerza al bate y buen contacto, quien en la 60 Serie Nacional estuvo entre los primeros bateadores. En esas credenciales si no hay nada fortuito, es el esfuerzo suyo y el de sus entrenadores,  los que dieron ese jonrón tan importante.

Pero imprescindible para el triunfo fue la labor del cuerpo de lanzadores, esta vez con el abridor Jonathan Carbó y el relevista Naykel Cruz. Ellos dejaron en solo tres imparables a los asiáticos, aun cuando el iniciador boleó a cuatro, uno de ellos el que anotó la única que permitió, en el ininng de apertura. El pinero Carbó ponchó a seis y tolero dos jits de Taipéi de China, con 82 enví­os (42 strikes), en tanto el zurdo matancero (33 serpentinas, de ellas solo diez bolas) retiró por la ví­a del ponche a cinco, dio una base y toleró un sencillo.

Los serpentineros cubanos en dos salidas han cubierto 14 episodios, en los cuales llevan 19 ponches y cuatro bases. No tan efectiva resultó la ofensiva en ambas presentaciones, aun cuando ante los taipeianos, en el último tercio consiguieron cuatro de los cinco  inatrapables que pegaron. Hasta el momento solo cinco hombres tienen jits en dos partidos: Guillermo Garcí­a (3), Geysel Cepeda (2) y Rangel Ramos, Loidel Chapellí­ y Yudiel González, con uno cada uno.

Garcí­a y Cepeda, tercer y cuarto bates, poseen cinco de esos ocho jits, pero no han podido empujar carreras, porque ni primero ni segundo consiguieron en esos cotejos llegar a las bases. Además, de ese total de conexiones, solo una fue con menos de dos outs. Para engrasar una maquinaria de ataque, ese panorama debe ser corregido.

No podrí­a obviarse, si se pretende hacer un resumen del cotejo Taipéi de China-Cuba, la labor del zurdo Li Yu Min, quien en cuatro y dos tercios aceptó las dos anotaciones impulsadas por el cuadrangular de González; permitió otros tres incogibles, transfirió a un adversario y ponchó a cinco. Tampoco soslayarí­a que en eta ocasión, cuando Carbó dio el primer sí­ntoma de debilidad y frente a una alineación que presentó cinco zurdos en lí­nea, el mentor cubano, Eriel Sánchez, actuó con precisión milimétrica y subió a la lomita a Cruz.

Cuba se medirá, durante domingo y lunes, a los europeos Alemania y República Checa, una oportunidad para que los bateadores suelten los brazos, antes de medirse a República Dominicana, el próximo martes. (Oscar Sánchez Sierra)  

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