Con la cuarta corona conseguida el pasado miércoles 29 de junio, los Alazanes de Granma se convirtieron en el equipo más galardonado en nuestro béisbol en los últimos 10 años.
Granma, cuatro veces campeón de la pelota cubana. (Montaje: Redacción digital/Fotos: Tomadas de Internet)
Osvaldo Rojas Garay
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01 Julio 2022
01 Julio 2022
hace 2 años
Dice un viejo refrán «cría fama y acuéstate a dormir »; sin embargo, el sueño de los cuatro históricos de las series nacionales de béisbol no puede prolongarse mucho más, porque si continúan dormidos y demoran en despertarse, puede que alguien ocupe el lugar de alguno de ellos.
Quizás, a la pelota que se juega en Cuba desde 1962 le está naciendo un histórico, lo sospechaba desde la temporada pasada y ahora, después de lo ocurrido este miércoles 29 de junio, lo he tomado más en serio.
Los Alazanes de Granma se han sentado por cuarta ocasión en el trono, para ratificarse como el mejor equipo de la última década. Si analizamos lo ocurrido a partir de la contienda de 2011-2012 veremos que de los históricos, las Avispas de Santiago de Cuba no pican desde la versión de 2007-2008, y los Leones rugieron por última vez en la campaña 2009- 2010, aquella final de la que los seguidores de los anaranjados no querrán acordarse.
De los cuatro grandes solo los Leopardos de Villa Clara en la temporada de 2012- 2013, y Pinar del Río en 2013-2014, han escalado el sitio más alto del podio de premiaciones.
En esta última década son los Tigres de Ciego de ívila los que andan a la caza de la caballería de Carlos Martí. Con Roger Machado al frente, los felinos se treparon en tres oportunidades en la cima de la pelota cubana. Desde la cita de 2011-2012 solo otros dos elencos se adjudicaron el cetro: los Leñadores de Las Tunas en 2018-2019, y en la siguiente campaña los Cocodrilos de Matanzas.
Aunque los yumurinos tenían algunas ausencias importantes, también a los potros de Carlos Martí les faltó el número uno de su cuerpo de pitcheo, Lázaro Blanco, quien en el 2021 abandonó el equipo que representó a Cuba en el Torneo Preolímpico. Tampoco contaron con Roel Santos y Raico Santos, Alfredo Despaigne (que apenas ha podido aportar a los títulos de Granma) y Guillermo García, toda una sensación en los playoff del pasado año.
Los Alazanes llegaron en estado de coma a su cuartel general, el estadio Mártires de Barbados, obligados a salir a trotar triunfalmente dos veces, y eso fue lo que hicieron: ganaron esos partidos y le regalaron a su pueblo el cuarto gallardete.
Así, frente al contrincante de la serie anterior mantuvieron la corona que alcanzaron por primera ocasión en la temporada 2016-2017 y luego revalidaron en la campaña de 2017-2018, para agregar la tercera en la serie 2020-2021, y ahora levantaron el trofeo por cuarta oportunidad. Curiosamente, Granma ha salido airosa en las cuatro finales que ha jugado.
El cuarto banderín les permitió a los Alazanes empatar con Pinar del Río en el quinto peldaño entre los equipos más ganado- res en los campeonatos nacionales, detrás de Industriales (12), Santiago de Cuba (8), Vegueros (6) y Villa Clara (5).
Con esa cantidad de coronas, el mentor Carlos Martí Santos se erigió como uno de los cuatro más laureados en las series nacionales, casillero que encabeza Jorge Fuentes Fleitas con 5, secundado por el trío integrado por los desaparecidos Higinio Vélez Carrión y Ramón Carneado, y el propio Carlos Martí.
A los Cocodrilos de Matanzas hay que re- conocerles que estuvieron a punto de quedar fuera de la zona de clasificación y accedieron a esa fase en la séptima posición, para transitar exitosamente los cuartos de finales, las semifinales y, definitivamente, llegar por tercera ocasión consecutiva a la discusión del gallardete.
Sin históricos en el podio
En la temporada beisbolera que acaba de expirar ninguno de los equipos históricos pudo subir al podio, algo que en los 32 playoff por la supremacía efectuados desde el campeonato 1989-1990 solo ha ocurrido en siete ocasiones; la primera vez, en el certamen de 1990-1991, en el cual Henequeneros ocupó el lugar de privilegio, seguido de Camagí¼ey y Provincia Habana.
Después, eso no sucedió más hasta la versión de 2014-2015, cuando se impusieron los Tigres de Ciego de ívila, escoltados por los Piratas de la Isla de la Juventud y los Cocodrilos de Matanzas. El hecho se repitió en las porfías de 2016-2017, 2017-2018, 2019-2020, 2020-2021 y 2021-2022.
Si analizaron detenidamente los datos que les ofrecemos, habrán llegado a la conclusión de que de las siete veces en que ninguno de los cuatro grandes ha alcanzado medallas, seis han sido en los torneos realizados desde el certamen de 2011-2012.
Una pincelada: en las cuatro ocasiones en que los Alazanes han reinado nunca un histórico ha podido subir el podio.