Cuenta la historia que detrás de cada dinastía hubo derrotas que marcaron la gloria de sus protagonistas. Leyendas de imperios y reinados colman las ciudades europeas a lo largo y ancho del Viejo Continente. Los palacios recorren cada milímetro de paisajes naturales transformados en civilización, y el balón detiene su paso ante el silbato final en Eidhoven.
Noventa minutos fluctuaron el tiempo entre el flashback de la temporada pasada y el retorno a la cima. Las crónicas deportivas hablan de infierno y gloria, de superposición a los miedos psicológicos y el resultado de la pasada final; confiesan una remontada histórica donde solo 45 minutos ocuparon un reloj de arena acompañado de dos goles en contra.
En las gradas, los colores del Barça despiertan del silencio. Tras vestidores las líderes del equipo han tomado el control. Era la última batalla para retomar el poder en Europa. Según los medios especializados, no estuvieron dispuestas a ceder en el intento. Fue su tercera final consecutiva, y para varias, la posibilidad de ganar la Champions por vez primera (Paredes, Rolfö, Engen y Pina).
Tras adoptar el modelo de gestión masculino las jugadoras del equipo culé pasaron a ser profesionales en su totalidad, por lo que combinaron la destreza de sus estrellas con un estilo de juego versátil donde la redondez de su plantilla las catapultó hacia el trono europeo. Dos años después de asumir el nuevo modelo llegaron los resultados. La primera Champions League se celebraba en 2021, pero sin público en las gradas.
Otra temporada de ensueño inició en 2022. Sin embargo, la final de Turín parecía llegar en el peor de los escenarios. El Olympique Lyonmais apuntaba su octava orejona y ellas vestirían la camiseta del esfuerzo para revertir la fortuna. Un año más tarde los fantasmas de tierra italiana amenazaron con revivir en la primera mitad de Eidhoven. El Wolfsburgo iba al descanso con dos goles en el marcador, mientras ellas acomodaban su defensa para imponerse en el ataque.
Luego del triunfo, los micrófonos ampliaron las ondas de la reconquista. La monarquía catalana vuelve al poder como dueñas y señoras del fútbol femenino. Pasan a la historia como uno de los ocho equipos ─Umea, Wolfsburgo, Turbine Potsdam con dos títulos; Frankfurt, con cuatro orejonas, y Olympique Lyonmais, con ocho─ que en 22 ediciones del torneo continental impuso su nombre en la cima de la tabla.
Según el diario digital Marca, las azulgranas acumulan 13 de sus 22 títulos oficiales en el último lustro competitivo, constituyendo un récord tanto para España como para Europa. Ante el engranaje de esta fórmula ganadora su DT, Jonatan Giráldez, expuso al diario español que el éxito estaba en la inversión y la calidad de las jugadoras para estar compitiendo en cada uno de los partidos del año.
Para la siguiente temporada el club ha renovado todos los contratos que expiraban el próximo 30 de junio, mientras que medios de prensa vinculados al quehacer azulgrana dieron a conocer la llegada de Ona Batlle, lateral del Manchester City nominada a mejor jugadora de la WSL y ex canterana del club catalán. A su vez, asumen el manejo de nombres importantes dentro del mercado de fichajes. Tal es el caso de la noruega Ada Hegerberg, delantera del Olympique Lyonmais.
Dos títulos, una final y una semifinal adornan el currículo desde 2019. El contragolpe dio resultado. En las gradas, la familia y sus fanáticos gritan Barça. Con el pitazo final todo se torna azulgrana. Eindhoven les devolvió el poder a las reinas de Europa.
Viernes, 23 Junio 2023 18:37
Por qué la TV Cubana no transmite partidos de fútbol femenino deberíamos sugerirselo tienen calidad a ese nivel ahora está de moda el voleybol y el balonmano dónde repiten lo mismo constantemente