Latinoamérica cerró el mes de julio con su mayor sonrisa en París, cuando Argentina abrió la senda dorada de la región, y Guatemala, por primera vez en la historia de los Juegos, ascendía a los más alto del Olimpo.
Para Cuba, por el contrario, este 31 de julio fue una jornada aciaga en la que su comienzo fue, sin duda, la nota más esperanzadora con el arquero Hugo Franco, que cayó en el segundo match de la ronda de 16 del arco recurvo.
En su primer pareo había logrado vencer, 7-3, al mexicano Bruno Martínez, pero luego perdió, 6-2, con el chino Yan Wang.
El resto del calendario cubano dejó un sabor amargo, sobre todo porque dos deportes clave para las aspiraciones de la delegación: el boxeo y el judo, perdieron temprano a sus respectivos representantes en el día.
En ambos casos, Kirguistán se encargó de poner la piedra en el camino. Sobre el ring lo sufrió el cienfueguero Saidel Horta (57 kg), a quien una cortadura le impidió seguir el combate en el tercer asalto, justo en el momento en que los jueces veían ganar a su oponente, Munarbek Seitbek Uulu, por decisión dividida de 3-2.
En el tatami, el experimentado Iván Silva se mostró tan pasivo ante el kirguiso Erlan Sherov (bronce en el último mundial), que no pudo anotar punto alguno y cedió, 10-0, en el tiempo extra llegó el tercer shido por amonestación.
Reidy Cardona, el otro atleta en competencia, concluyó sexto en la segunda ronda de la semifinal C/D del scull individual, con tiempo de 7:15.63 minutos, que solo le alcanzaron para acceder a la final D.
Pero Latinoamérica sí estuvo a la altura de la torre Eiffel este miércoles. En su bicicleta, un argentino apodado el Maligno, fue buenísimo en la BMX estilo libre, e inscribió su nombre, José Torres Gil, como primer titular de la región en París 2024.
Y si de primicia se trata, una hora después la tiradora guatemalteca Adriana Ruano se convertía en la primera deportista de su país en acceder a los más alto del podio de una cita estival. También del foso salió esta segunda presea de su país, pues la víspera, el bronce de su compañero de equipo, Jean Pierre Brol, había detenido 12 años de la Tierra del Quetzal.
Inimaginable antes de este 31 de julio que la exgimnasta de 29 años iba a romper 45 de los 50, para superar en dos la anterior marca olímpica de 43 impuesta por la eslovaca Zuzana Rehak Stefecekova en Tokio. Pero sucedió, y la única latinoamericana en la justa final, dejó en plata a la italiana Silvana Stanco (40) y la australiana Penny Smith (32).
También Julio terminó en París con fiesta para los franceses, y el mayor congratulado fue León Marchand, el joven nadador que, desestimando favoritismos de campeones defensores, en dos horas se impuso en dos estilos diferentes: los 200 metros mariposa y los 200 pecho. Con este par, ya suma tres doradas, porque ya se había colgado la de los 400 metros combinados individual, en los que demostró, además, su dominio en las especialidades de libre y espalda. ¿Acaso está naciendo un nuevo Phelps? Bueno, se ha informado que desde 2020 recurrió a Bob Bowman, el mismo entrenador del Tiburón de Baltimore.
Así son los Juegos Olímpicos. Nacen nuevos mitos —¿acaso estamos ante un nuevo Phelp?— y grandes estrellas no brillan. Entre las opacadas esta vez está el gran tenista Rafael Nadal, quien luego de quedar fuera en la competencia individual, este miércoles tuvo la tristeza compartida —que no toca a menos— con el otro integrante del dueto español, Carlos Alcaraz, tras ser derrotados por los estadounidenses Austin Krajicek y Rajeev Ram.