
La pescadería Sandino reinició las ventas en los bajos del edificio Doce Plantas, después de obras constructivas que incluyeron la instalación de recursos para preparar productos y atender solicitudes a domicilio en Santa Clara.
Esa unidad fue cerrada por filtraciones, aunque prestó servicios en una instalación provisional, al mismo tiempo que se inauguró otro punto comercial en la zona de los repartos Vigía y Escambray, cuyas poblaciones acudían antes al Sandino.
Esta remodelación contribuye a las transformaciones previstas desde la calle Buen Viaje hasta las cercanías del estadio Sandino, donde deberá haber más de 40 centros comerciales, recreativos, gastronómicos, así como de diferentes servicios.
René Peña Carrazana, director de Pescavilla, informó que existen 27 unidades en la provincia, pero los planes inversionistas contemplan otras 20, que estarán ubicadas en antiguas cabeceras municipales y comunidades de 15 000 o más habitantes.
Mediante vehículos acondicionados para trasladar y vender los productos acuícolas, serán atendidas también localidades pequeñas, lo cual es un viejo reclamo que la entidad ha estado preparando condiciones para satisfacer.
Estas acciones se inscriben dentro del programa de trabajo Villa Clara con todos, que incluye obras constructivas, pero también medidas organizativas y de reorganización de los recursos para elevar la calidad de vida de la población.
Peña aclara que los volúmenes para la venta están distantes de cubrir las demandas, pero aún así tratarán de elevar la calidad de sus servicios con ofrecimientos como el que hacen conjuntamente con la revista Mar y Pesca, que dedicó una edición especial a recetas de cocina con productos de Pescavilla y que son aportes recibidos de la población villaclareña.