
Santa Clara acaba de conmemorar sus 329 años de fundada, y desde el propio 15 de julio, fecha de su nacimiento, encara la llegada de sus 330 de existencia. Un acontecimiento que compromete a hacer mucho más por una ciudad que desde sus orígenes ha sobresalido por la belleza de su entorno y el empuje batallador de su gente.
Todavía estaba la Gloriosa Santa Clara en sus albores como villa cuando un viajero, el historiador Nicolás Joseph de Ribera, al recorrer sus primigenias calles, afirmó: «Villa Clara […] es pueblo nuevo, pero precioso y bien arreglado […] ».
Y en medio de tantas pretensiones por hacer de la capital de Villa Clara lo que ella merece, la efervescencia se hace mayor al ser el municipio sede de las actividades centrales de la provincia por el 26 de Julio, y uno de sus consejos populares más jóvenes y pujantes, el «José Martí », el lugar escogido para conmemorar el aniversario 65 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes.
Una designación que, como señala la nota del Buró Provincial del Partido, reconoce «la cohesión que tuvo este municipio para enfrentar situaciones complejas » y la seguridad de que semejante reto estimulará a los santaclareños a «mayores esfuerzos y resultados en las tareas con vistas a la conmemoración del aniversario 60 de la Batalla de Santa Clara ».
Desde que fuera dada la noticia, el hervidero de trabajo en la urbe más central de Cuba se ha incrementado, y en el consejo popular que lleva el nombre del Apóstol se aprecia un ajetreo constante, en aras de que sea digna sede del acontecimiento patrio en el que murieron cinco de los seis villaclareños participantes, incluido Osvaldo Socarás Martínez, hijo ilustre de esta tricentenaria ciudad.
Reparto José Martí: El barrio que soñamos
Cuando Santa Clara decidió ampliar sus raíces geográficas allá por los años 70 y 80 del pasado siglo, uno de los sitios tenidos en cuenta en el ordenamiento territorial resultó el que hoy conocemos como reparto José Martí, aunque entonces, cuando apenas daba sus primeros pasos, fuese llamado Indaya.

Pero el nombre del Héroe Nacional cubano es tan venerado, y la población que allí se fue asentando tan merecedora de ostentarlo, que ya casi nadie se acuerda de la despectiva denominación. Hoy «José Martí » no solo es uno de los 18 consejos populares de la ciudad, sino que clasifica entre los más pujantes y activos demográficamente, con 8,5 km2 de extensión y una población por encima de las 19 000 personas.
En conversación con el vecino José María Delgado Rodríguez a la entrada del minimercado 8 de Octubre, uno de los mayores de la ciudad, con 2816 núcleos y 8146 consumidores supimos que lleva 21 años viviendo en el reparto, y ello le da visos de confiabilidad a sus palabras: «Desde que se supo lo de la sede del 26, aquí no se ha parado de trabajar, y si quiere corroborarlo, camine por nuestras calles y vaya incluso hasta mi casa, para que vea a una cederista enamorada de su comunidad y el bello jardín que tiene a la entrada del edificio ».
No se equivocaba José María. En algunos lugares del reparto habrá un antes y un después del acto por el Día de la Rebeldía Nacional, sobre todo en la llamada Pista de José Martí, donde tendrá lugar la concentración popular y que adquiere aires renovadores con nuevas luminarias, la reparación de su plataforma central y la pintura de los edificios aledaños.
Un entorno que se modifica para bien a cada minuto y que tendrá en las próximas horas un sitial dedicado al Héroe Nacional cubano, un sueño hecho realidad para los vecinos del reparto. Situado en un pequeño promontorio, con un diseño que no rompe con el medio ambiente del lugar, tendrá de fondo un bello pensamiento martiano: «En la grandeza de la Patria y de sus hijos, no es mentira decir que se siente crecer el corazón ».
También resaltan dos centros de enseñanza que prueban la obra de la Revolución en un consejo popular alejado del centro de Santa Clara: la escuela primaria Celia Sánchez Manduley y la secundaria básica Julio Pino Machado, instituciones educativas que mejoran su aspecto exterior con nuevas cercas perimetrales y la pintura de sus fachadas, entre otras acciones constructivas.
De camino a casa de José María para conversar con su esposa, y en compañía de Yosvany Gutiérrez Jova, presidente del consejo popular asumió por vez primera sus funciones como delegado en octubre y como presidente en enero, nos detuvimos en la terminal de ómnibus del reparto, que nada tiene que envidiarle en confort y belleza a las restantes existentes en la provincia.
En espera de sus respectivos horarios de salida había no menos de seis ómnibus Diana y otros dos ruteros, y mientras conversábamos con Milagros Contreras Pérez, la expedidora, comprobamos el flujo constante de las guaguas en períodos de tiempo que no rebasaban los diez minutos, ¡y sin cola!, al menos a las 10:30 de la mañana del martes 18 de julio.

De la terminal de «José Martí » salen ómnibus hacia los extremos norte y sur de la Circunvalación (ruta 210), Manajanabo (ruta 205), Boquerones (ruta 206), Hatillo (ruta 202), Yabú (ruta 201), Minerva (ruta 204), Base Aérea (ruta 200) y Suazo (ruta 700), por mencionar algunos, a los que se suman las tradicionales rutas 2 y 8, y el refuerzo en horas pico con dos ómnibus de la ruta 3, con destino a la Universidad Central de Las Villas.
Ya en casa de Onelia Torresilla Moreno, de 78 años, pudimos corroborar lo dicho por su esposo. Realmente el jardín que ha logrado cultivar frente a su edificio multifamiliar es hermoso e incluye una florecida mata de príncipes negros, con dos bellos ejemplares: «Es mi orgullo y todos me la respetan ».


Afirma ser fundadora de los CDR en su Placetas natal, y que nunca se ha desvinculado de las tareas cederistas: «Aquí soy la organizadora y hago cuanto sea necesario. Me encantan las flores, por eso me esmero por tener mi entorno bonito, aunque otros no se preocupen tanto por eso. Y lo seguiré haciendo mientras tenga fuerzas ».
Y es que gente como el matrimonio de más de 50 años de José María y Onelia hacen mucha falta en un reparto de tanta vegetación y áreas verdes, pues la realidad, sin edulcorarla, nos corrobora que muchas veces la apatía se apodera de las personas, y el marabú y las malezas inundan y contaminan el paisaje.
«Ahora el ambiente de trabajo es muy bueno », nos dice el presidente del consejo popular, Yosvany, quien, como buen anfitrión, nos conduce por varios lugares del crecido reparto, deseoso de mostrarnos lo que se hace por estos días. El joven graduado de ingeniero radioelectrónico en tropas coheteriles antiaéreas nos lleva a otros dos sitios significativos del barrio: la farmacia, inaugurada el 14 de junio pasado, en homenaje al aniversario 90 del natalicio del Che, y el Mercado Agropecuario Estatal (MAE) El Apio.
En la farmacia, segunda del reparto, apreciamos buen trato y comodidades para el trabajo; en tanto, en «El Apio » se laboraba con intensidad para ampliarlo, a pesar de la hora, pasadas las 11 de la mañana, y del sofocante calor que este mes de julio nos viene «regalando ». El surtido era de plátano fruta y boniato. Tampoco en la placita había cola, al menos en ese instante.
Santa Clara más allá de «JoséMartí »
Pero Santa Clara rebasa con mucho al consejo popular José Martí. La Ciudad de Marta y el Che trasciende ese espacio geográfico y se esparce por decenas de kilómetros más, con sus luces y sus sombras.
Por eso, el diálogo con Yaritza Moya Caballero, presidenta de la Asamblea Municipal del Poder Popular, se tornaba necesario. Transcurrió pocas horas antes de su partida hacia La Habana en su condición de diputada, y los minutos de conversación le permitieron dar una panorámica de la Santa Clara de hoy y, sobre todo, de esa a la que aspiramos y por la cual se trabaja de manera ardua, aunque a veces los resultados no sean tan visibles y las opacidades empañen la luz que irradia la capital de Villa Clara.

«La sede del 26 significó alegría, pero sobre todo, un gran compromiso. Somos la ciudad cabecera de la provincia y su imagen ante el país, y eso no podemos olvidarlo. Ganar el derecho al acto por el aniversario 65 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes nos obliga a trabajar más y mejor, y a seguir enamorando a los santaclareños con el programa Villa Clara con Todos y con nuestro Santa Clara se Suma.
«Lo realizado hasta ahora ha demostrado que se puede modificar nuestro entorno, hacerlo más bello y atractivo, y no solo desde el punto de vista estructural, con nuevos objetos de obra, nuevos sitios, sino transformando al ser humano en su espiritualidad y compromiso con su ciudad, con su entorno más inmediato: la cuadra, el barrio, la comunidad.
«Ha sido un año bien complejo, pues la ciudad ha recibido el embate de varios eventos meteorológicos muy fuertes. Solo en viviendas tuvimos 6991 afectaciones, sin contar otras muchas entidades administrativas como bodegas y escuelas, por mencionar dos ejemplos. Pero los santaclareños se han sobrepuesto a todo, y juntos, pueblo y gobierno, bajo la dirección del Partido, hemos sabido salir adelante bajo el principio de no dejar a nadie desamparado.
«El 1 % de la contribución territorial ha sido un factor dinamizador de la economía. La gente necesita saber mucho más lo que significa ese indicador, pero solo por ese concepto en el año 2017 Santa Clara utilizó en función de su desarrollo más de 17 millones de pesos, y para este 2018 debemos disponer de 18 millones 576 300 MN, de los cuales ya se han empleado 6 millones 484 300 en obras como la reparación del Palacio de Pioneros y la reconstrucción capital de la escuela primaria Hurtado de Mendoza, situada en nuestro Boulevard, que también se transforma y reanima de manera radical. Además de dos instituciones que prestan servicios y han tenido una acogida muy favorable: el círculo juvenil Somos Jóvenes y el centro recreativo Los Pinos; el primero ya terminado y el otro aún en mejoras de su infraestructura.
«Nuestro parque Vidal ahora es más bello, la gente se preocupa más por cuidarlo, y esa es una importante transformación. Poco a poco se recupera el sentido de pertenencia hacia ese lugar insigne de la ciudad.
«Ya estamos trabajando para el aniversario 330 de la ciudad, y el 2019 debe ser de mucho esfuerzo; pero confío y me siento orgullosa de los santaclareños, de la gente de esta hermosa tierra.
«Queda la gran insatisfacción de la higiene en el territorio, lo que no solo compete a Comunales como entidad administrativa, sino a todos los que convivimos aquí. Está claro que algo en lo que hay que seguir trabajando y batallando duro es en el protagonismo individual de cada ciudadano en su entorno. Existen las condiciones para librar y ganar esa batalla transformadora ».
El 24 de julio, en horas tempranas de la mañana, será el acto. Para entonces, todo en el reparto José Martí estará reluciente. Yosvany dormirá poco o nada esa noche, y Onelia y José madrugarán algo más de lo acostumbrado para estar entre los primeros.
Y al concluir el homenaje moncadista, volverá a iniciarse otro ciclo de trabajo que tendrá como colofón la Batalla de Santa Clara y el triunfo revolucionario del 1.o de enero de 1959. A la vuelta de 365 días, la santa ciudad de Marta y el Che vestirá sus mejores galas para su cumpleaños 330.