El dique derecho de la presa Alacranes, en el municipio de Sagua la Grande, quedó rehabilitado luego de las averías sufridas con el paso del ciclón Irma por la provincia. (Foto: Luis Machado Ordetx)
Luis Machado Ordetx
@MOrdetx
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01 Febrero 2020
01 Febrero 2020
hace 4 años
El proceso inversionista para elevar el bienestar público, así como las labores de servicios que prestan las dependencias de Recursos Hidráulicos en Villa Clara, fueron objeto de discusión en la reunión de la gestión anual del sector, donde también se expusieron los avances registrados durante el último año en un proceso de continuidad constructiva que, a pesar de los resultados, todavía demanda mayor exigencia en la calidad de las terminaciones.
Al cierre de año con el propósito de aprovechar, racionalizar y mejorar el encargo social del recurso agua y su eficacia, se planificaron 32 obras, unas de pequeña envergadura y otras voluminosas, pero solo concluyeron 17 por carencias de suministros materiales y afectaciones energéticas, y las restantes pasarán al programa anual contemplado en el período.
Longina Brito Navarro, delegada del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) en la provincia, al presentar el informe, señaló el monto abultado de inversiones, y resaltó que se acometieron otros trabajos en la supresión de salideros, colocación de válvulas y paneles eléctricos, así como rehabilitación de conductoras para apuntalar el aprovechamiento y la confiabilidad de los servicios.
Al respecto Yamila Riverón Cardoso, directora de Cuadros del INRH, señaló la importancia del vínculo entre supervisores, proyectistas y explotador de la obra para buscar unidad de criterios, y resaltó las relaciones que deben establecerse con la comunidad para informar y dar respuesta a los planteamientos que favorezcan la calidad y los abastos de agua.
Durante el año se acometieron los estudios de la rehabilitación de redes en el reparto Van Troi, en Caibarién, así como el dragado del malecón de esa ciudad y la toma de agua, mientras en Mataguá continuaron con la sustitución de tuberías y supresión de salideros, y en marzo acabarán similares trabajos en el acueducto de Vueltas.
Unos 30 millones de pesos, cifra en la cual aparecen los mantenimientos, se invirtieron durante el período, y se incluyen también las limpieza de canales de la costa norte, vitales en la producción agropecuaria, así como limpieza de ríos en Santa Clara, territorio con un acueducto antiguo, mejorado con los años, y donde se acometen decisivas acciones.
Julio César Amores Hernández, director de Acueducto y Alcantarillado, añadió que, a pesar de las limitaciones económicas, concluyeron la rehabilitación de la laguna de tratamiento de residuales en Ochoíta, la potabilizadora de Bayoya, así como en la conductora de agua de Minerva, mientras en Palmarito colocaron 2,3 km de tuberías y restan otros 1,2 por situar, hecho que beneficiará en lo perspectivo el servicio de abasto a la ciudad.
Hizo un llamado a elevar la disciplina tecnológica, el sentido de pertenencia, en estaciones de bombeo y otras instalaciones del sector, pues la provincia tuvo las mayores roturas de equipos relacionados con los suministros de agua del país. Alertó profundizar en la búsqueda de alternativas locales para aumentar la solución de problemas y satisfacer los reclamos de la población con un agua de calidad y acortamiento de ciclos de envío. No obstante, esclareció que el abasto de agua a la población no será el más idóneo, pero donde existe un problema se examinan opciones para perfeccionarlo de inmediato.
Destacan en ese sentido las acciones emprendidas en el polo turístico de la cayería norte, con la ampliación de la planta de residuales La Estrella, así como otra desalinizadora en cayo Santa María y las conductoras y redes en Las Brujas, vitales incluso en la reutilización de agua en jardinería.
En tal sentido Vladimir Santalla, director de ese Acueducto, alertó sobre la necesidad de priorizar inversiones que favorezcan la sostenibilidad de los residuales con el medio ambiente, y alertó que las plantas son nuevas, pero «tienen equipamientos con más de dos décadas en explotación » y atienden a 24 clientes, que en su mayoría aprovechan el agua beneficiada por debajo de la cantidad que se recicla en una jornada.
La calidad de las obras terminadas para garantizar servicios, a partir del respeto a los proyectos, preparación técnica y criterios de los constructores, fue otro de los reclamos para eliminar chapucerías y ofrecer valor de uso eficiente a lo que se concluye.
El pedagogo Lamberto ílvarez Gil, de la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas, invitado a la reunión de la gestión anual del INRH, resaltó los avances alcanzados en la carrera de Ingeniería Hidráulica, las relaciones con las provincias centrales en la recepción a estudiantes de cuarto año de la especialidad, así como las posibilidades que brindarán los estudios de técnico superior de agua y saneamiento, sistema de formación para el próximo curso docente.
Añadió que desde la carrera de dos años de duración de técnico medio en hidráulica, se consolidan perspectivas del personal especializado, actividad que inició Villa Clara antes que otros territorios del país.
Sin duda, el tema agua pasa por muchos tamices, pero desde la provincia se trabaja con sistematicidad para dar respuesta a la política nacional de ese recurso natural, necesario en la vida de todos.