Un análisis crítico sobre lo ejecutado en el 2020 en el Plan Turquino correspondiente a Villa Clara, trascendió este jueves 22 de abril en la sede del Gobierno Provincial, a través de videoconferencia con los municipios de Manicaragua, Remedios y Caibarién, acogidos al programa.
En el encuentro, presidido por René Bacallao Figueroa, miembro del Buró Provincial del Partido, se evaluaron los objetivos de trabajo de la etapa, en un año difícil caracterizado por la presencia de la COVID-19 y las limitaciones de recursos.
Entre los resultados del período figuran el cumplimiento de la producción cafetalera y mantener en cero la mortalidad materno infantil en las montañas de Guamuhaya, así como la rehabilitación de escuelas, consultorios y del Hospital de Jibacoa.
En la etapa se dio seguimiento a problemas medioambientales en el central Heriberto Duquesne de Remedios, y se procedió a la recuperación del Polo Productivo de Dolores en Caibarién, como parte del Programa Alimentario.
De igual forma, en Jibacoa el Grupo Empresarial de Comercio concluyó la rehabilitación de unidades de la Gastronomía que fueron afectadas por la tormenta tropical Eta, y que elevan la calidad de vida de sus habitantes.
Sin embargo, los integrantes de las comisiones de trabajo coincidieron en que queda mucho por hacer, y persisten insatisfacciones asociadas a problemas eléctricos, con la transportación y los viales, así como otros asociados a la cobertura telefónica y la calidad de la señal, aun cuando se avanza en la solución a planteamientos de los vecinos.
Por otra parte, todavía no se logra que los organismos implicados vean el Plan Turquino con la prioridad que merita, para proteger a la población y frenar la migración.
Otro asunto que exige una solución inmediata tienen que ver con el déficit de agua en Jibacoa, debido a la sequía, y el seguimiento a problemas medioambientales en el ingenio Heriberto Duquesne, además de imponerse la apertura de más puntos de venta en el lomerío, y fomentar las plantaciones de café, tanto en las montañas como en el llano, entre otras demandas, que exigen una mirada permanente y diferente al Plan Turquino.