
Las transportaciones de azúcar refino para asegurar la canasta básica de la población de Artemisa y La Habana comenzaron esta semana, vía contenedores-automotor, desde el ingenio Quintín Bandera, en Corralillo, dijo Onel Pérez González, jefe de fabricación de esa entidad.

Unas 5000 toneladas métricas, ensacadas, se enviarán a esas provincias occidentales, suministros que garantizan una parte del edulcorante asignado a esos territorios.
También la región central se beneficia de las producciones obtenidas por esa Empresa Agroindustrial Azucarera, y hasta la fecha el compromiso anual, ascendente a unas 40 000 t, está a un 77,5 % de ejecución.
Pérez González significó que, a pesar de las medidas higiénico-sanitarias para contener la COVID-19, el colectivo termina unas 300 toneladas por jornada, con índices inferiores a 1.6 t de crudo por refino, cifra que los sitúa dentro de las normas técnicas establecidas.
Antes que concluya octubre, significó a Vanguardia, completarán las 40 000 t, volumen que marca el compromiso de producción. Después de esa fecha incrementarán los ritmos de reparaciones de la industria, para comenzar la zafra a finales de diciembre próximo.

Ese ingenio, último que en Villa Clara reinició en 2016 contiendas azucareras luego de una década en conservación, el pasado año no hizo crudo, actividad que retomará en la venidera zafra al asumir materia prima de sus plantaciones y de aledañas pertenecientes a «Panchito Gómez Toro », de Quemado de Gí¼ines.
Prevén hacer unas 25 000 t de crudo y otras 42 000 de refino, dijo Pérez González, quien reafirmó la voluntad de los trabajadores de efectuar reparaciones de calidad y disminuir los costos de fabricación y el tiempo perdido por interrupciones operativas.
Un refuerzo de industriales de Quemado de Gí¼ines, el municipio vecino, se adiestra en la obtención de refino, y continuarán laborando en áreas clave del antiguo ingenio «Ramona » durante toda la contienda, añadió.
De las reparaciones, precisó, brigadas de pailería ejecutan la ampliación del centro de acopio Felicidad, propósito que permitirá a partir del desmontaje de equipos ubicados en «Carlos Baliño » (Santo Domingo) y «Batalla de Santa Clara » (Camajuaní), el recibo de un mayor volumen de materia prima.
Hacia el interior del ingenio, apuntó, repararán la parte mecánica y acometerán, a pesar de las afectaciones con gases industriales y otros insumos, labores de pailería y mantenimiento programado en la industria.