No todos los tropiezos de la cadena agroindustrial azucarera tienen los acostumbrados trasfondos objetivos por carencias materiales sea petróleo, piezas de repuestos, ajustes de maquinarias, según las comprobaciones que se hacen en el terreno a partir del vínculo directo con el surco, los centros de acopio, los ingenios y…
Dos jornadas de trabajo demuestran que las subjetividades pesan en el curso que toma una zafra, ya en las postrimerías, urgida de fabricar hasta la última cuota de crudo posible, y por supuesto elaborar derivados que sustituyen importaciones de todo tipo.
Los recorridos por las entidades Agroindustrial Azucarera José María Pérez (Camajuaní), así como Ifraín Alfonso Liriano (Ranchuelo), entre las de peores resultados en la contienda, evidenciaron descontroles en los procesos organizativos vinculados con el campo y los ingenios.
Este jueves, en el último de estos territorios, Osnay Miguel Colina Rodríguez, primer secretario del Partido en Villa Clara, constató problemas de disciplina laboral, tecnológica y administrativa que, luego de 103 días de molida, tienen sus huellas marcadas en la producción.
En ese período el acumulado de molida es de 32.05%, y aunque procesó unas 99 202.8 toneladas de caña 60% de la planificada, el rendimiento fabril y el recobrado distan de lo estimado y solo se elaboraron unas 6 799.4 t métricas de azúcar.
Las cifras evidencian bajas molidas por falta de materia prima, roturas de equipos, lluvias y…, con llegada tardía de caña al basculador. También altos índices de materia extraña aparecieron en el ingenio, lo cual se traduce en pérdidas de azúcar en el proceso tecnológico. Hubo, además, limitaciones en el abastecimiento eléctrico asociado a la generación de energía.
Todo indica que allí obtienen el 37.1% del crudo planificado en una contienda que está por concluir. No obstante, estiman aquí «acariciar » unas 12 000 t para satisfacer una parte imprescindible de la canasta básica que recibe la población. Alcanzar ese resultado constituye un reto, y un compromiso, en azucareros con cultura y tradición villaclareña, dijo Colina Rodríguez.
No obstante, hay que desterrar el descontrol existente en los frentes corte y tiro de caña, y aprovechar la noche con el funcionamiento de la maquinaria de moderna tecnología para garantizar, desde los campos, abastos de materia prima a las jornadas diarias de la industria, confirmó el primer secretario del Partido.
Alertó que los problemas no admiten justificaciones cuando se desconocen las causas que los originan. «Allí tiene que estar el Partido para dar la información precisa, divulgar los indicadores de zafra, integrar a los organismos que involucran las faenas productivas, así como discutir y analizar, y también estimular al hombre para elevar la eficiencia agroindustrial », acotó.
Modesto Rojas Gómez (Ingo), dirigente sindical, resaltó que «el ingenio es de todos, Hay que desterrar la indisciplina laboral, y existe desatención a los trabajadores por parte de los organismos del municipio. Eso daña la estabilidad de los hombres en áreas del campo y de la industria. Son hechos que repercuten en la producción y en las interrupciones de operaciones por falta de caña, mantenimiento o roturas », detalló.
En adelante se precisa de una coordinada estrategia de trabajo, dijo Amado Cordero López, director de la Empresa, y Pedro Montenegro Abreu, al frente de la industria, añadió que se hará el máximo de azúcar con lo que se tiene de recursos. Pensar en zafras futuras en un ingenio que acostumbra a rebasar sus compromisos de fabricación, superiores en 2015 a las 32 000 t, obliga a repensar en las áreas cañeras, satisfacer los volúmenes de siembra, ascendentes a una 2 539. 8 hectáreas durante el año, y también el incremento de los rendimientos agrícolas, tal como orientó la dirección del país.
El dedo se colocó en la llaga. Son reiterados los incumplimientos productivos y organizativos en actividades de corte y tiro tardío de la materia prima, las deficiencias ferroviarias y las indisciplinas tecnológicas asociadas a las áreas de molinos y planta eléctrica. Esos hechos no solo constituyen exclusivos en la entidad visitada. También aparecen en unos y otros territorios en zafra, según se comentó.
De la lección, a pesar de aparecer en las postrimerías de la contienda, brotó la responsabilidad de eliminar fisuras subjetivas para defender hasta el último grano de azúcar posible un proceso agroindustrial en el cual la provincia acumula unas 45 000 t por debajo de la meta trazada, la más baja de la historia.
Colina Rodríguez lo dijo allí: exigencia y control en las estructuras políticas y administrativas para no bajar la guardia y preparar la recuperación del sector en una mirada directa hacia los campos y las industrias.