En días de extrema tristeza para el pueblo cubano, constituye una necesidad reconocer a los héroes anónimos que apoyan en el salvamento y rescate de personas víctimas de accidentes, desastres naturales y otros siniestros.
Cuando el suizo Henry Dunant socorrió a los soldados heridos en la batalla de Solferino, en 1859, la idea de una agrupación de personas capacitadas para prestar asistencia médica a las víctimas de la guerra constituía solo el sueño humanitario de un comerciante adelantado a su época.
Ya en febrero de 1863, un comité de personas interesadas en el proyecto más tarde, Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) se reunió por primera vez en Ginebra, Suiza, y, en agosto de 1864, la organización logró la aprobación del primer Convenio de Ginebra. Según lo estipulado en el documento, los ejércitos asumían la obligación de asistir a los soldados heridos independientemente del bando al que pertenecían. ¡Victoria para Dunant!
Con el fin de viabilizar las operaciones de auxilio del CICR, los servicios sanitarios disponían de un emblema distintivo uniforme para su identificación en el campo de batalla: una cruz roja sobre fondo blanco. Aunque el objeto social de la organización se ha diversificado, la insignia mantiene su representación y significado.
Desde su fundación, en 1863, «el objetivo único del CICR ha sido prestar protección y asistencia a las víctimas de los conflictos y enfrentamientos armados », según refiere el sitio digital oficial del Comité Internacional de la Cruz Roja. No obstante, con el surgimiento del Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, la organización no gubernamental comienza a apoyar en otras situaciones desastres naturales, accidentes, conflictos internos, búsqueda de personas desaparecidas, protección marítima, etc.
Con el tiempo, el movimiento ha logrado organizar la red humanitaria más grande del mundo, presente en todos los países, integrada por millones de voluntarios,, y con las misiones de prevenir y aliviar, en cualquier circunstancia, el sufrimiento humano y proteger la vida y la salud de la persona en tiempo de conflicto armado o en otras situaciones de urgencia.
En el caso de Cuba, fue el insigne médico Diego Tamayo y Figueredo quien fundó la Sociedad Cubana de la Cruz Roja, en 1909, bajo el precepto de servir al bienestar del hombre y la comunidad inspirándose en los principios de humanidad, neutralidad, independencia, carácter voluntario, unidad y universalidad como bandera.
La Cruz Roja en Villa Clara
«En 1958, la Brigada 17 de la Cruz Roja en Santa Clara participó en la toma del Tren Blindado y asistió al canje de prisioneros luego de la acción relata Miguel íngel Fernández López, director Provincial de la Cruz Roja en Villa Clara, y la Brigada 21, del municipio de Placetas, estuvo en el bombardeo de El Pedrero en Fomento; en este último enfrentamiento, el tiroteo incluso alcanzó la bandera de los rescatistas ».
Más de 60 años después, alrededor de 2000 voluntarios distribuidos en los 13 municipios villaclareños integran el Frente de Operaciones y Socorro comúnmente conocido como Frente de Salvamento y Rescate de la Cruz Roja en la provincia.
Según refiere el director provincial, la distribución de los rescatistas se ha organizado en escalas según la especialización y los recursos que poseen. «En los comités locales se organizan los actores más cercanos a la comunidad; este pequeño grupo de personas brinda los primeros auxilios en caso de desastre hasta que llega la fuerza especializada.
«Una vez detectada la situación, los rescatistas de la comunidad localizan a los grupos de operaciones y socorro en los distintos niveles comunidad, municipio, provincia que, en dependencia de la gravedad, asisten al lugar del siniestro » continúa.
El Frente de Operaciones y Socorro interviene, en estrecha vinculación con los órganos de la Defensa Civil, en las acciones de preparación para desastres naturales; pero también asiste a aquellos eventos, provocados por el hombre u otros factores, que amenazan a individuos y comunidades.
«En los últimos dos años nuestra tarea principal ha sido apoyar en el enfrentamiento a la COVID-19. La Cruz Roja ha trabajado, ininterrumpidamente, en centros de aislamiento, hospitales de campaña, puntos de control de fronteras; en el traslado de personas enfermas y graves hacia los centros de salud, y en la campaña de vacunación; siempre de forma voluntaria », explica a Vanguardia Fernández López.
Si bien resulta verídica su disposición constante para asistir a las personas en cualquier lugar del país, los grupos especializados provinciales poseen indicaciones directas sobre cuándo y cómo intervenir.
«Varias personas me han preguntado por qué no he viajado a La Habana para incorporarme a las operaciones de rescate y salvamento en el Hotel Saratoga; sin embargo, hasta tanto no se solicite la ayuda del Grupo de Operaciones y Socorro de la Cruz Roja de Villa Clara, nosotros no podemos intervenir insiste Miguel íngel.
«El rigor en la organización del trabajo nos distingue. Todos hacinados en un mismo lugar, lejos de ayudar, entorpecemos el rescate de personas con poco tiempo de vida y con urgencias médicas ».
Un ejército de voluntarios
«Mi mochila está lista afirma visiblemente emocionado íngel Villega González, miembro del Frente de Operaciones y Socorro en la provincia si mañana solicitan la ayuda de Villa Clara, nosotros ya estamos preparados para partir hacia la capital provincial y ayudar en lo que sea, tanto en el interior de la estructura colapsada como en el exterior ».
Hace 25 años que íngel Villega González es voluntario de la Cruz Roja Cubana. «Yo estoy donde se me necesite; usted puede verme acompañando a los pioneros durante la Toma Simbólica de la ciudad de Santa Clara, en el Pico Turquino con un grupo de jóvenes o en una vuelta ciclística.
«He recibido a inmigrantes haitianos tras varios días de navegación; mi experiencia en Playa Piñón, en Sagua la Grande, con los náufragos fue muy dura. He asistido a víctimas de accidentes en trenes. He trabajado en el rescate de personas en lugares inundados. Formé parte de caravanas que escoltaron al Comandante en Jefe, Fidel Castro; a Raúl Castro y a Juan Almeida. En 25 años se hace bastante ».
Daneel González González ostenta el título de Líder del Grupo de Operaciones y Socorro de la Cruz Roja villaclareña. Con casi 20 años de trabajo ininterrumpido en el salvamento y rescate, enumera de memoria los requisitos mínimos para asistir a una persona en situación de vulnerabilidad.
«Ser rescatista requiere, además de la voluntad, preparación. Uno debe dominar las técnicas de camillaje y vendaje, los principios básicos para realizar la reanimación cardiopulmonar (RCP) y otros procedimientos de emergencia; pero, fundamentalmente, debe brindar apoyo psicológico al herido, lograr calmar a la persona y transmitirle seguridad.
«Con 15 años en la Cruz Roja, de solo mirar a un compañero se sabe el próximo paso. Formar un todo es fundamental y en la Cruz Roja Cubana somos equipo », lo dice, y el orgullo aflora a la vista.
Miguel íngel Fernández López afirma constantemente con la cabeza mientras escucha los testimonios de sus colegas y, en un momento de pausa, dispara: «Los rescatistas se activan sin mandato ni solicitud. Mi teléfono no ha parado de sonar desde el accidente en el "Saratoga". Los mensajes y llamadas de los voluntarios para notificar que están preparados para apoyar han sido una constante en momentos de tanta incertidumbre.
« ¡Villa Clara está lista! me indica el líder del Grupo de Operaciones y Socorro de la Cruz Roja villaclareña y así lo comunicamos a la Cruz Roja en La Habana a solo minutos de la explosión ».
Otros frentes de la Cruz Roja Cubana
Frente de Leyes de Derecho Internacional Humanitario: Atiende las leyes y normas de derecho internacionales para la protección de soldados heridos en campos de batalla. También gestiona la comunicación y la difusión del Derecho Internacional Humanitario.
Frente de Seguridad Acuática: Se encarga de garantizar la seguridad acuática mediante el servicio de salvavidas y la adecuada señalización de áreas de baño en playas, piscinas, ríos.
Frente de Cruz Roja Juventud: Propone y realiza proyectos encaminados al desarrollo de la educación, la salud y la comunidad; agrupa y atiende a los niños y jóvenes en círculos de interés y en la Cruz Roja Juvenil.
Frente de Vía a la Vida: Educa sobre la señalización en el tránsito y la necesidad de evitar accidentes.
Frente de Cambio Climático: Actividades para desarrollar la Tarea Vida de conjunto con el Citma.
Frente de Restablecimiento de Contactos y Búsqueda de Familiares: Restablecimiento de contactos entre familias separadas.
Frente de Radiocomunicaciones: Atiende las comunicaciones internas de la Cruz Roja Cubana.