A los profesionales cubanos que se ocupan de registrar, captar, procesar, analizar, conservar, publicar y diseminar información estadística se dedica cada 6 de septiembre, como recordatorio de la fecha de inicio del Censo de Población y Vivienda de 1970, el primero realizado después del triunfo de la Revolución.
La labor que a muchos parece complicada, aburrida e, incluso, anónima, resulta esencial para entender el comportamiento de parámetros económicos, sociales y poblacionales, elaborar pronósticos y contribuir a la toma de decisiones. No en balde, los trabajadores de la Oficina Nacional de Estadística e Información (ONEI) en Villa Clara aseguran que todo lo que ocurre en la provincia pasa por sus manos, traducido en cifras.
Según explicó a Vanguardia Orialy ílvarez Hernández, directora provincial de la ONEI, el flujo informativo en materia económica nace en las empresas, unidades presupuestadas, cooperativas agropecuarias y los nuevos actores económicos (cooperativas no agropecuarias y mipymes), que entregan la información a las 13 oficinas municipales. Estos profesionales procesan, revisan y validan los datos para emitirlos al sistema provincial, y luego al nacional.
Desde el punto de vista sociopoblacional, quedan registrados y procesados los datos relativos a nacimientos, defunciones, matrimonios, divorcios y migraciones tanto internas como externas.
El Día del Trabajador Estadístico llega en plena elaboración de los anuarios provinciales y municipales, que deben estar listos para su publicación entre septiembre y octubre. El estudio quedará reflejado en 21 capítulos, con una serie histórica de cinco años, que permitirá realizar comparaciones, tendencias y demás análisis.
Otro reto próximo para los 157 trabajadores de la ONEI llegará con la «Encuesta nacional sobre la situación económica de los hogares », que se realizará entre el 2 de octubre y el 17 de noviembre, en 854 viviendas de las zonas urbanas de toda la provincia.
También, se acerca el nuevo Censo de Población y Vivienda, la más compleja y relevante de las investigaciones, y como tal, demanda toda la preparación de los estadísticos villaclareños, pues sus resultados impactarán sobre la vida socioeconómica de la provincia y del país en los años venideros.