Dinámicas poblacionales en Villa Clara: desafíos y nuevas miradas (I)

Si nos planteamos un análisis coherente sobre el envejecimiento poblacional en Villa Clara, resulta necesario detenernos en los comportamientos vinculados con la natalidad y fecundidad.

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Chábeli Rodríguez García y Carlos Daniel Quiroga Morejón
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15 Junio 2023

No hay patria, nacionalidad o país sin pueblo. La gente, su cultura y formas de interrelacionarse son quienes le dan sentido al espacio que delimitan las fronteras. Por ello, la demografía, entendida como la ciencia que estudia a las poblaciones, desempeña una función transcendental para conocer futuras tendencias, tanto a nivel local como global. Al fin y al cabo, estas dinámicas son una traducción directa del tipo de relaciones que establecemos entre nosotros mismos y con el mundo.

(Ilustración: Alfredo Martirena)

La migración, la natalidad, el envejecimiento, la familia o la mortalidad constituyen algunas de las variables que modifican y caracterizan a los grupos poblacionales. Lejos de ser estáticos, estos indicadores varían y son sensibles al contexto histórico y socioeconómico o, incluso, a la misma geografía. A lo largo de la historia, tanto especialistas demográficos como ciudadanos comunes le han temido a determinados comportamientos de las variables anteriormente enumeradas. Un mundo sobrepoblado, o las bajas tasas de natalidad y crecimiento globales, resultan posibles escenarios que despiertan las alarmas de muchos. El sobresalto ante fenómenos como estos, motiva la persistencia de mitos demográficos y reducen las vidas humanas a meras estadísticas.

Cuba se enfrenta actualmente al desafío de poseer una población altamente envejecida. Según los resultados del Censo de Población y Vivienda realizado en el año 2012, y corroborado por las cifras apreciables en informes de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), el 25, 3 % de la población villaclareña supera los 60 años de edad, lo que coloca al territorio como el más avejentado del país. 

No obstante, más allá de que el envejecimiento poblacional, demográficamente, ya no se considera un problema en sí mismo, sí plantea desafíos relacionados, principalmente, con el cuidado de las personas mayores que necesitan asistencia médica, así como con la creación de garantías para una mejor calidad de vida.

¿Qué motiva el envejecimiento poblacional de Villa Clara? En no pocas ocasiones, acercamientos simplistas y poco fundamentados, concluyen que este fenómeno se debe a las migraciones externas e internas; o sea, al éxodo creciente de personas jóvenes. Aun cuando, efectivamente, la migración incide en este fenómeno, la baja fecundidad y natalidad —según explican estudiosos del Observatorio Demográfico Provincial, del Programa de Atención al Adulto Mayor y del Programa de Atención Materno -Infantil (PAMI) — constituyen causas directas de tendencias negativas en el crecimiento de la población y, por lo tanto, en el incremento de adultos mayores en relación a la población comprendida entre 0 y 14 años de vida. 

Si nos planteamos un análisis coherente sobre el envejecimiento poblacional en Villa Clara, resulta necesario detenernos en los comportamientos vinculados con la natalidad y fecundidad.

En números rojos

Hoy, la fecundidad y cantidad de nacimientos en nuestra provincia muestran números inferiores en comparación a las estadísticas de años precedentes. Según el Dr. Yandry Alfonso Chang, al frente del PAMI en Villa Clara, hasta mayo del presente año la provincia ha tenido 230 nacimientos menos que en igual período del 2022. De acuerdo a datos aportados por Milaxy Yanet Sánchez Armas, vicegobernadora provincial, a finales del pasado año el territorio contabilizó 347 nacimientos menos que en el 2021. De manera general, la tasa de natalidad ha disminuido a un 6, 5 %, mientras que la tasa de fecundidad ha decrecido a un 1,37 %.

Entre los principales aspectos que condicionan estas tasas de natalidad y fecundidad se encuentra la infertilidad. Cuba y Villa Clara responden a una propensión mundial a la infertilidad. Un informe publicado recientemente por la Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que el 17,5 % de la población adulta de todo el planeta —una de cada seis personas— es infértil. En el caso de Cuba, este indicador oscila entre un 12 % y 14 %. A pesar de que en nuestro país existe un Programa de Atención Materno-Infantil y una Red de Atención a la Persona Infértil, la cantidad de embarazos por reproducción asistida y otros tratamientos para la fertilidad en Villa Clara, aun no presenta una efectividad ideal.

Según refiere a Vanguardia la Dra. Belkis Ávalos Méndez, coordinadora provincial del Programa de Reproducción Asistida de Villa Clara, desde el comienzo de 2023 y hasta inicios de junio se han logrado, por medio de la Red de Atención a la Persona Infértil, 152 embarazos, lo cual se traduce en un 16, 1 % por encima del 40 % que contempla el programa. Sin embargo, en el caso de la Consulta Provincial para la Atención a la Persona Infértil, los números son menos esperanzadores. 

La Dra. María Vega Castillo, miembro del grupo multidisciplinario que conforma esta consulta, señaló que, de las aproximadamente 2000 parejas atendidas en 2022, solo fueron posibles 43 embarazos. La especialista también recalcó que existen edades óptimas para la reproducción, ya que mientras más avanzada sea la edad del paciente, resulta mucho más complejo lograr la efectividad de los tratamientos. Sin embargo, durante los últimos tiempos ha crecido la afluencia de pacientes que superan los 36 años de edad a la Consulta para la Atención a la Persona Infértil. 

La conquista de la autonomía corporal, así como el fomento de la educación sexual y la superación personal y profesional, ha permitido que muchas mujeres cubanas pospongan la maternidad. Incluso, según afirma Ávalos Méndez, los resultados preliminares de una encuesta realizada por el Programa de Reproducción Asistida, aún por publicar, arrojan un «cuantioso número» de féminas adultas que, a pesar de no tener hijos, no desean procrear en ningún momento de su vida. 

Sobre los factores socioculturales que influyen en la postergación de la maternidad, Lucrinés Azcuy Aguilera, Doctora en Ciencias Sociológicas y profesora del Centro de Estudios Comunitarios de la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas (UCLV), considera que la migración interna influye notablemente. «Son muchos los villaclareños, en especial los profesionales, que deciden migrar a otras provincias; esta constituye una estadística impactante. Entre las personas que emigran hay muchas mujeres en edad reproductiva y que, por lo tanto, al no estar en Villa Clara, no aportan a nuestros indicadores de fecundidad», asegura.

La brecha de género también deposita más responsabilidades en las mujeres que, además de tener una profesión o trabajo, deben enfrentarse, sin suficientes apoyos familiares y materiales, a la crianza de los hijos y los cuidados del hogar. Esto provoca, en algunos casos, el rechazo a la maternidad. 

Al respecto, Livia Quintana Llanio, Asociada del Programa del Fondo de Población de Naciones Unidas en Cuba, agrega: «Las diferencias en los roles de género provoca una carga que lleva a muchas mujeres a tomar decisiones con relación a la reproducción que no se corresponden con un ejercicio efectivo de sus derechos. Mujeres que hubieran tenido la intención de tener más de un hijo pero que, por el peso de los cuidados, terminan quedándose con uno solo». 

Un cambio de enfoque


En Cuba se han implementado varias iniciativas y políticas para fomentar la reproducción. Una de ellas, el Programa de Reproducción Asistida, que hoy muestra números favorables en nuestra provincia. Las 13 consultas para la Atención a la Persona Infértil de los municipios de Villa Clara tienen una alta prioridad dentro del Sistema de Atención Primaria de Salud. Por medio de este programa se aseguran el transporte hacia las consultas de baja y alta complejidad, tanto dentro como fuera de la provincia. No obstante, y según revelan las doctoras María Vega y Belkis Ávalos, la ausencia de mejores condiciones materiales o la falta de un banco de esperma, limitan la capacidad de acción. 

La creación de un grupo de atención a la dinámica demográfica en el territorio, conformado por especialistas de diferentes instituciones y formaciones, posibilita un mejor asesoramiento para las máximas autoridades del Gobierno Provincial, a la hora de articular proyectos que atiendan a los indicadores poblacionales. La vicegobernadora de Villa Clara afirma que todos los meses se reúnen con este equipo asesor y que, gracias a dichos encuentros, han puesto en marcha disímiles iniciativas.

La implementación de estrategias de desarrollo local que atiendan específicamente a las características demográficas de cada localidad; el acondicionamiento de los hogares maternos; la colaboración con mipymes y otras formas productivas, estatales y privadas, para asegurar la alimentación de las embarazadas, la fabricación de artículos imprescindibles, como ropa para bebés, y el mejoramiento en las prestaciones de servicios, de las viviendas y los centros de Salud de comunidades rurales con tendencias hacia el decrecimiento, constituyen proyecciones que podrían influir positivamente y a largo plazo sobre el aumento de la natalidad y fecundidad de la provincia. 

«En Cuba contamos con un grupo de proyectos en los cuales trabajamos estos temas de los cambios demográficos. Uno de los más innovadores involucra al Instituto Internacional de Periodismo José Martí. Tenemos una intención clara de formar comunicadores y periodistas en temas relacionados con las dinámicas demográficas, con la participación del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana y la ONEI. 

«A nivel municipal también contamos con una serie de proyectos, experiencias relativamente nuevas, pero que surgen de la propia necesidad de los gobiernos locales de entender las dinámicas demográficas y de incorporarlas a las políticas», explicó Marisol Alfonso de Armas, jefa de la Oficina del Fondo de Población de Naciones Unidas en Cuba.

Las políticas y programas en función del fomento de la natalidad en Cuba deben trascender la aspiración de «mejorar» los datos estadísticos. Según lo referido en el Estado de la Población Mundial del 2023, un informe anual emitido por el Fondo de Población de las Naciones Unidas, hoy los desafíos demográficos globales precisan de un cambio de enfoque y discurso, en lugar de aferrarse a antiguas y alarmistas narrativas.

Resulta preciso crear condiciones para las posibilidades de reproducción en Cuba, pero, siempre desde el respeto por la autonomía corporal y la disposición individual de ejercer la paternidad o maternidad. Es necesario comprender las condiciones económicas y culturales, así como la influencia de los roles de género dentro de las dinámicas poblacionales. Solo así podremos enfrentar, de forma efectiva, los desafíos demográficos que hoy se nos imponen.

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Spra

Viernes, 16 Junio 2023 12:54

Un tema que no se trata, al menos en esta primera parte, es la emigración, dónde cada día se va del país un número i.portante de jóvenes en edad reproductiva. El tema es muy serio y las soluciones efectivas no aparecen