Después del primer ordeño viene un pastoreo seguro. (Foto: Luis Machado Ordetx)
Luis Machado Ordetx
@MOrdetx
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08 Agosto 2023
08 Agosto 2023
hace 1 año
Las muertes de animales por desnutrición constituyen una «vergüenza para los ganaderos», dijo hace tiempo Fidel, cuando ideó el fomento lechero en zonas de las futuras pecuarias La Vitrina-Managuaco-El Tablón, consideradas, entonces, baluartes de la rama en la zona central cubana.
Ahora, con la depauperación de la ganadería villaclareña y el propósito de recuperación —por su incidencia en la sustitución de importaciones—, los fallecimientos en bovinos, más allá del indeseable hurto y sacrificio ilegal de reses, dejan una alerta. Al parecer, los proyectos de siembra de alimentos —pastos y forrajes—, a pesar de la sequía, las limitaciones de combustibles y la falta de piezas de repuesto para la maquinaria, son ficticios.
Los números no mienten cuando los animales necesitan alimentarse, con pastos y agua estable, durante unas 16 horas diarias. Dicen los especialistas que el mejor horario es el nocturno, pero desgraciadamente el empleo de corraletas, para evitar el hurto y sacrificio ilegal, atenta contra el propósito.
El hecho de que la mortalidad acumulada rebase los 13 690 animales, y el 19 % recaiga en desnutrición, resulta significativo. Otro 15 % se estima tiene que ver con trastornos digestivos —bacteriano o parasitario—, y eso obliga a pensar que la alimentación es deficiente por carencia de pastos, forrajes y plantas proteicas.
Entonces no existen pastos saludables. Una cara diferente se observa en algunas de las 36 vaquerías que llaman de intervención —de atención directa y compromiso productivo—, como la atendida por la Brigada de Veterinaria de la Empresa Agropecuaria Benito Juárez, en Placetas, y áreas de campesinos como Odel (Monguín) Tápanes Moya, de la Cooperativa de Créditos y Servicios Filiberto Mujica González, en Cifuentes. Allí, a diferencia de otros lugares, existen 2.50 hectáreas de siembra de alimento animal, con 10 especies diferentes —sin contar los pastos naturales— de plantas proteicas.
Unos sí, otros no. Hay que romper la diferencia y convertir la siembra de alimento animal en regla. Al ritmo de las muertes ocurridas, a pesar de la sequía, en la considerada segunda provincia con mayor masa ganadera del país —después de Camagüey—, se llegará al récord de 2010-2011, cuando en Villa Clara murieron más de 23 000 bovinos. Es como para alarmarse en una rama, la ganadera, en vías de reversa.
Los datos son frescos, sacados de una reunión crítica que sostuvo Alberto López Díaz, gobernador de Villa Clara, con autoridades agropecuarias municipales. Espantoso es que, de las muertes, unos 7740 animales clasifican en la categoría de vacas, añojos y novillas —sin contar el monto de terneros hembras—, lo cual apunta a que, en lo perspectivo, habrá menos hembras en producción lechera y reproductiva. ¿Adónde vamos a llegar?, no lo sé.
Los nacimientos —aunque los índices no están bajos, 61 %— reportan unos 2331 por debajo de lo planificado para el período. Claro, todo a costa de la monta directa y no de la necesaria inseminación artificial, que garantiza el mejoramiento genético de la masa animal.
¡Ah! ¿Qué decir de los aportes lecheros? Sólo se satisface un 64 % del plan, con unos 7 280 600 litros de menos en relación con la contratación acumulada. En todo hay reservas productivas. Unos 1394 criadores no han hecho contribuciones lecheras en el último trimestre. En Manicaragua, Cifuentes, Placetas, Ranchuelo y Camajuaní abundan casos específicos con incumplimientos manifiestos.
En agosto se ajustó la contratación a unos 5 991 100 litros de leche . Por día serían, de acuerdo con cálculos del Minag, unos 193 300. Sin embargo, sólo se entregan 98 800 litros a las industrias pasteurizadoras. Así, a pesar de las deficiencias, como dijo el gobernador de Villa Clara, no se puede… La sustitución de polvo lácteo, importado y cada vez más caro en mercados foráneos, sin el aporte de los ganaderos se hace distante para todos.
Hay criadores que con limitaciones objetivas, siempre impuestas por la sequía, al cierre de julio compilaban un 70 % de liquidación de la leche contratada y rebasaban los litros/vaca, y también los nacimientos… ¿Por qué unos sí y otros no? Todo pasa por el tamiz de los ajustes de medidas, las exigencias, los compromisos y, en última instancia, las sanciones. En definitiva, como dijo el gobernador, «hay productores que se burlan de los directivos, y eso es inadmisible. ¿Dónde está la respuesta a las 63 medidas que aprobó el Buró Político del Partido y el Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros? No existe respuesta productiva y hay limitada aplicación de los resultados de la ciencia y la técnica, y eso, como se conoce, no ocurre en todas partes», refirió López Díaz.
Las contribuciones de carne de res, mediante la venta a mataderos, tampoco andan bien, según las planificaciones. En el período sólo se satisface al 78.2 % en bovinos y al 85 % en equinos.
No sé qué será de aquella pequeña fábrica de pienso que años atrás fundaron en La Vitrina para procesar maíz. Al precio que tiene el grano y con las escasas siembras de pastos frescos, lo más seguro es que ande paralizada. Del maíz, jamás observé su caña verde y fresca en forraje ni tampoco ensilada, como alternativa ante situaciones difíciles como las actuales. Claro, las plantaciones de ese cereal son inexistentes. ¿Qué decir de la soya? Son mínimas las multiplicaciones de sembrados, y cuando se logran, vale más la extracción de aceite que el aprovechamiento de los residuos para la alimentación de los animales. Del ensilaje, ¿qué decir?: brilla por su ausencia, como a veces dicen los manuales orales de los pedagogos.
La ganadería precisa de una recuperación, pero no de boquilla, sino efectiva, en la cual los animales, con manejo y cuidados veterinarios, así como con pastos saludables y agua, ofrezcan el necesario cambio que, desde la finca, requiere el país.
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JCSC
Miércoles, 09 Agosto 2023 18:24
Exelente, creo que se habla mucho y se hace poco, un sólo ejemplo de mucho que desmotiva, en abril mi padre vendió 4 toros, tres vacas y un añojo, todo esos animales importaron después de descuento 39 mil pesos, sin descontar transporte muyyyyyy caro, tres de ésos animales no acalsaron para pagar el traslado hasta la pesa como llaman los campesinos, imajinarlo que un puerco de 200 libras tenga hoy más valor que esos 8 animales, que pesaron más d dos toneladas, mucho sacrificio para tan poco resultados, muy mala atención a los productores, ésos ganaderos también tienen que vivir con la inflación, creo que en poco tiempo ni con el ejército van a poder acopiar leche y carne, solo es un ejemplo de tantos que hay en la ganadería,
Miércoles, 09 Agosto 2023 18:24
Exelente, creo que se habla mucho y se hace poco, un sólo ejemplo de mucho que desmotiva, en abril mi padre vendió 4 toros, tres vacas y un añojo, todo esos animales importaron después de descuento 39 mil pesos, sin descontar transporte muyyyyyy caro, tres de ésos animales no acalsaron para pagar el traslado hasta la pesa como llaman los campesinos, imajinarlo que un puerco de 200 libras tenga hoy más valor que esos 8 animales, que pesaron más d dos toneladas, mucho sacrificio para tan poco resultados, muy mala atención a los productores, ésos ganaderos también tienen que vivir con la inflación, creo que en poco tiempo ni con el ejército van a poder acopiar leche y carne, solo es un ejemplo de tantos que hay en la ganadería,