Villa Clara se sumó al Día Mundial del Corazón (29 de septiembre) y promovió estilos saludables de vida con la realización de una caminata desde el Parque de La Pastora, en la capital territorial, hasta las áreas de ampliación del Cardiocentro Ernesto Che Guevara.
Cuidar el corazón se convierte en prioridad, pues las estadísticas indican que debemos incentivar la prevención, si se tiene en cuenta que la enfermedad cardiovascular (ECV) resulta la principal causa de muerte en América y, según estudios, también en el mundo.
A ello se añaden los efectos de la hipertensión arterial (HTA) como causante de más del 50 % de las ECV, en un universo en el que Cuba no escapa de esos estragos e incorpora, además, entre las afecciones más frecuentes, la insuficiencia cardiaca, el exceso de colesterol, la angina de pecho, el infarto de miocardio y los trastornos del ritmo cardiaco o arritmias.
En el caso de la HTA, llama la atención que entre el 10 % y el 15 % de los habitantes desconoce la presencia de la afección o se muestran asintomáticos, aun cuando tienen cifras descontroladas.
El panorama provincial indica, en uno de los últimos estudios, que el 29,3 % de los pobladores mayores de 15 años padecen la afección y se suman a los 2,6 millones registrados en el país.
Por otra parte, cerca del 95 % de los hipertensos aparecen entre los altos consumidores de sal.
Los expertos subrayan que la ECV es un término amplio para definir irregularidades cardíacas y de los vasos sanguíneos. Estas se asocian con frecuencia a la aterosclerosis, debido a la acumulación de grasa y colesterol en las arterias.
De acuerdo con la Federación Mundial del Corazón, las enfermedades cardiovasculares ocasionan 17,5 millones de muertes al año, tantas como el resultado de sumar las provocadas por el sida, tuberculosis, malaria, diabetes, cáncer y patologías respiratorias crónicas.
Factores de riesgo vinculados al tabaquismo, las dietas inadecuadas, la obesidad, el poco ejercicio físico, la presión arterial elevada, el consumo excesivo de alcohol, la diabetes mellitus y la hiperlipidemia acentúan su aparición, por lo que la prevención constituye el eslabón más importante.
Respecto al inevitable estrés provocado por las múltiples complejidades de la vida, los especialistas recomiendan aprender a manejarlo de conjunto con los médicos de familia, sicólogos, trabajadores sociales, organizaciones de masas y por los activistas que insisten en métodos preventivos.
El lema de este año por el Día Mundial del Corazón es: «Un mundo, un hogar, un corazón».