Las medidas adoptadas en Santa Clara por la Empresa Provincial de Transporte, en coordinación con el Gobierno provincial, para apoyar el traslado de pasajeros ante las actuales restricciones con el combustible, han sido bienvenidas por la población, en momentos de tensión en que se impone un aventón solidario en la carretera.
Para cumplir con esta encomienda, puesta en vigor desde el pasado 26 de septiembre, el transporte urbano en Santa Clara recibe el apoyo de vehículos de entidades estatales —de lunes a viernes, de 7:00 a.m. a 9:00 a.m. y de 3:00 p.m. a 5:00 p.m.— con dos viajes como mínimo por cada conductor en ambos horarios.
La incorporación de carros del sector estatal permite acercar a su destino a quienes diariamente necesitan viajar para llegar puntual a su centro de trabajo o estudio, asistir a un turno médico, o realizar cualquier otra diligencia dentro de la ciudad.
Con este propósito se habilitaron piqueras en la zona hospitalaria, parque Vidal (frente a la Emisora CMHW), Buen Viaje (ruta 3), y el consejo popular José Martí, donde vehículos de distintos organismos —según el cronograma establecido— proceden a la recogida de pasajeros, así como en los tramos mientras haya capacidad disponible.
Jarys Hernández Simón, directora provincial de Transporte, expresó a la prensa provincial que mantienen un control diario de su cumplimiento de la iniciativa, con la presencia en las piqueras de funcionarios del Gobierno.
La práctica ha tenido una buena acogida entre los santaclareños, al disminuir el tiempo de espera en las paradas de ómnibus de las rutas urbanas y suburbanas, con un incremento continuo del número de personas transportadas.
Para comprobar el impacto de la medida, en la piquera del parque un equipo de Vanguardia entrevistó a choferes dispuestos a colaborar, así como a santaclareños beneficiados con la medida.
Marvin Rodríguez Martínez, profesor de Enfermería de la Universidad de Ciencias Médicas, expresó que la idea resulta oportuna, pero debió ponerse en vigor mucho antes, pues el tema transporte sigue siendo uno de los principales problemas que asedian a los santaclareños.
También, el conductor Librado Reinoso Pérez, de la Asamblea Provincial del Poder Popular, manifestó que corresponde a los choferes estatales poner su granito de arena en esta encomienda, sin que medie dinero alguno por el servicio prestado de manera gratuita.
Por su parte, Pablo Herrera Echavarría se refirió a la excelente idea; sin embargo, enfatizó que deberían habilitar más piqueras en la carretera a Sagua y otros puntos de la ciudad que en horario pico se encuentran abarrotados.
En tanto, Ignacio Rodríguez Veliz, chofer de la Dirección Provincial del Banco Popular de Ahorro, consideró que se requiere una mayor divulgación, pues muchos desconocen del apoyo que en estos momentos brindan los transportistas estatales.
«No saben que desde horas tempranas de la mañana nos encontramos aquí para ofrecer nuestra ayuda solidaria», puntualizó.
Asimismo, Ana Díaz Valle, estudiante de sexto año de Medicina, declaró que por ahora no tiene que preocuparse por llegar temprano al hospital provincial clínico quirúrgico Arnaldo Milián Castro, donde está de prácticas, porque en el parque en pocos minutos aborda el transporte que la llevará directo a esa institución sanitaria.
Catalino Alonso Arbolaez, chofer del vehículo estatal con chapa 150434 de la Oficina Provincial de Estadística, hace un alto en el timón para que los pasajeros suban al auto procedente de esa entidad. Ante nuestra interrogante sobre la iniciativa, destacó que esta ya tiene muchos seguidores por su impacto en la población.
En la caravana de vehículos a la espera del arribo de más personal, Martha Lidia Chaviano Herrera, al volante de un vehículo de la Dirección Provincial de Economía y Planificación, consideró excelente la medida; sin embargo, concordó también en que pudieran habilitarse más piqueras en paradas donde se concentra mucho personal, como en la del policlínico Martha Abreu y el reparto Camilo Cienfuegos (bloques de Pastorita), y aligerar la transportación en otras zonas alejadas del centro de la ciudad.
Los entrevistados coincidieron en que esta experiencia debería mantenerse todo el año para aliviar las tensiones diarias de los santaclareños en la carretera.