Bajo el nombre «Huertos urbanos resilientes», Villa Clara pone en marcha un nuevo proyecto asociado al Programa Mundial de Alimentos (PMA), de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para América Latina y el Caribe, que brindará apoyo a la agricultura urbana, con el objetivo de robustecer los sistemas locales de producción de comida en la central geografía.
La nueva propuesta —enmarcada en los municipios de Caibarién, Sagua la Grande y Encrucijada— también propone tributar a los Sistemas de Atención a las Familias (SAF) e incorpora la generación de proteína animal (ganado menor) para el consumo social.
En recorrido por el norte de la provincia y en compañía del vice primer ministro cubano, Jorge Luis Tapia Fonseca, la directora regional del PMA, María Dolores Castro, confirmó lo acertado de la implementación de estas acciones, encaminadas a dar continuidad a las actividades derivadas del proyecto ProAct, concluido en noviembre del año pasado.
Para la segunda etapa, que recién comienza, en el territorio se escogieron seis productores que cuentan con la masa básica y las condiciones para la obtención de leche de cabra (otra de las líneas que se suma), quienes tributarán a los seis SAF existentes, con beneficio para 632 personas, explicó.
Por su parte, la directora regional del PMA remarcó que se trata de una iniciativa innovadora y con un alto retorno, pues permite el acceso de la población a alimentos frescos, producidos localmente; genera empleos e ingresos y posibilita abastecer los mercados, una experiencia con resultados probados en los vegetales, y que alcanzará la línea de carne, leche y queso.
Tapia Fonseca insistió en el correcto aprovechamiento de los recursos y llamó a identificar las potencialidades agropecuarias de la localidad, como parte del proceso de transformación productiva que se lleva a cabo en el país, y que mostrará resultados a mediano y largo plazo.
Con una masa animal compuesta por 46 chivos, 25 carneros, 10 cerdos, más de 70 gallinas y otras aves de corral como pavos, guineos y patos, Alexis Ramos Falcón deviene uno de los campesinos implicados en este nuevo proyecto, que pretende suplir en 2024 el 50 % de las necesidades proteicas de los ancianos caibarienenses.
Durante el periplo, se evidenciaron también los beneficios de ProAct en el organopónico Hospital (hoy favorecido con sistema fotovoltaico) y en el seminternado Francisco Ferrer Guardia, donde se proveen vegetales, tres veces a la semana, para la alimentación de 43 trabajadores y 303 niños.
En este último, el vice primer ministro cubano comentó que se debe asegurar el aporte a la escuela y que «los niños se impliquen en la siembra, visiten los organopónicos, conozcan a los productores. Es importante la orientación vocacional desde las primeras edades, eso necesitamos: no solo personas sensibilizadas con la alimentación saludable, sino también con el trabajo en la tierra», precisó.