Integrantes del gremio que serán distinguidos en la jornada por el Día del Trabajador Eléctrico, hablan sobre su destacado quehacer en un sector altamente comprometido con la población.
Norma Pérez Chirino. (Foto: Cortesía de la Empresa Eléctrica)
Idalia Vázquez Zerquera
@IdaliaVzquez
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11 Enero 2024
11 Enero 2024
hace 10 meses
Hace tres años que Norma Pérez Chirino se jubiló; sin embargo, su apego al trabajo como especialista B de Recursos Humanos del Grupo de Organización del Trabajo, los Salarios y Capital Humano de la Empresa Eléctrica Villa Clara, hizo que retornara a su antiguo oficio, ahora recontratada.
A su memoria retornan los años en que inició su vida laboral en Camagüey, y luego, a su regreso a Santa Clara, laboró en Planta Mecánica, hasta que en 1995 se incorporó al sector eléctrico.
«Considero la Empresa Eléctrica como una escuela donde se aprende cada día. Aspiro a contar con un relevo preparado con un ritmo de trabajo similar al mío, cuando me retire definitivamente».
Norma fue seleccionada mejor trabajadora de su Departamento en varias ocasiones, y este año repite la condición como jubilada. Sin embargo, con modestia, expresó que hay que darles oportunidad a otros que, como ella, sienten el trabajo como parte de sus vidas.
También, el despachador del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), ingeniero Idalberto González Ávila, recibirá la condición de Hombre Seguro.
Sobre su encomienda manifestó que tiene una alta responsabilidad, al controlar toda la trasmisión de energía de la provincia. Ello requiere de decisiones bien pensadas, pues de ellas depende la seguridad de otros que laboran en subestaciones y líneas de alta tensión.
«Hay que ser muy riguroso en el cumplimiento de las reglas de oro de la seguridad para evitar accidentes fatales», insistió Idalberto.
También reflexionó sobre el 2023 como un año difícil, al recordar momentos de tensión en la trasmisión de energía, tanto en Villa Clara como en todo el país.
Idalberto considera su profesión como uno de los eslabones más importantes para mantener el servicio eléctrico en viviendas y el sector estatal, y vela porque los apagones programados o por interrupciones, tengan una corta duración para afectar lo menos posible a los clientes.
«Ser despachador exige una alta responsabilidad y concentración para tomar las decisiones correctas, porque más allá del despacho hay linieros que trabajan en la reposición de líneas y hay que protegerlos».
Aun cuando hombres como Idalberto resultan indispensables, también son necesarios los trabajadores de servicios, como es el caso de Grisel Martínez Núñez, quien labora en la Unidad de Servicios Generales como facturadora del Comedor.
Siendo muy joven, la especialista en Economía y Almacenes atendió el Transporte en la Unidad Empresarial de Base (UEB) de Santa Clara, y luego ocupó una plaza en el Centro de Atención Telefónica 18888, donde también fue supervisora.
«¿Si deseo cambiar de centro de trabajo? Para nada. Mis compañeros y jefes son honestos y comprensivos, siempre dispuestos a ayudar. Seguiré aquí hasta que llegue a la edad de jubilación».
Otro especialista con una vasta experiencia en sus 25 años de quehacer ininterrumpido, resulta el inspector Víctor González Leyva, de la UEB Santa Clara, cuyo trabajo está dirigido al mejoramiento de los indicadores de eficiencia asociados a la recaudación y eliminación de pérdidas eléctricas mediante una correcta medición y facturación de la energía consumida, y de esta forma, alcanzar eficiencia en la energía que se comercializa en el municipio de Santa Clara.
González Leyva opinó que en sus 25 años de trabajo en el sector, donde también fue dirigente sindical, ha encontrado excelentes compañeros, a quienes les inculca la necesidad de superarse de manera permanente para ofrecer un servicio de calidad.
Entre los jóvenes con un excelente desempeño, se encuentra Dayana Hernández Sureda, especialista de la Oficina de Atención al Cliente y Daños a la Propiedad, de la UEB Santa Clara.
Aquí comenzó sus andares como operadora y supervisora del Centro de Atención Telefónica 18888. La experiencia la capacitó para asumir su actual encomienda, donde interactúa con el público con mucho tacto, para que el cliente aclare sus dudas y se vaya convencido de que se le dará seguimiento a su caso.
Tanto Norma como Idalberto, Grisel, Víctor y Dayana, recibirán el merecido reconocimiento y medallas por años de servicio, en el acto provincial de agasajo al sector, que esta vez contará dos sedes en la UEB de Automatización e Informática (ATI) y el municipio de Ranchuelo.