Uno de los proyectos presentados por el Centro Meteorológico Provincial (CMP) a su Consejo Técnico Asesor es el estudio del impacto de la variabilidad climática y su influencia en la migración de aves en el segmento del archipiélago Sabana-Camagüey, correspondiente a Villa Clara.
La Mtr. C. Ismabel María Domínguez Hurtado, subdirectora técnica de la institución, presentó la propuesta ante la limitada información disponible en torno al influjo de las condiciones migratorias de las aves, como problema que pretende atenderse a través del proyecto.
El 60 % de la cifra total de sitios de reproducción de aves marinas y acuáticas registrados en el país corresponde a esos taxones (grupo de poblaciones) de migración que arriban a Cuba durante la primavera, procedentes de múltiples áreas del Caribe y zonas costeras del norte de América del Sur.
A ello se suma que más del 90 % de los ejemplares se reproducen en la región cubana sugerida para el estudio.
La investigación incluye la partida de las aves desde su origen, la cantidad de individuos que arriban, las condiciones fenológicas y la velocidad de avance, entre otros aspectos.
El tema combina el plan del Estado para el enfrentamiento al cambio climático o Tarea Vida con la Estrategia Ambiental Nacional, y por el efecto del tiempo y el clima, se sugiere el aporte de las estaciones meteorológicas de Sagua la Grande y Caibarién en cuanto a la migración.
Los expertos del CTA recomendaron la posibilidad de contactar con el Centro Nacional de Radares, radicado en Camagüey, a fin de valorar la posibilidad de utilizar sus servicios en la detección de las bandas de aves, al tiempo que pudiera incluirse como una de las entidades participantes en el proyecto.
Trabajos muy fundamentados sobre el tema los tiene el Centro de Estudios y Servicios Ambientales (Cesam) de Villa Clara, con expediciones de años y favorables resultados.