Presentación del libro Cien horas con Fidel, del intelectual franco-español Ignacio Ramonet, quien recibió, en la tarde de este lunes, la distinción Escudo de Armas de Villa Clara.
El intelectual franco-español Ignacio Ramonet presentó en el Teatro La Caridad la cuarta edición de su libro Cien horas con Fidel. (Foto: Ramón Barreras Valdés)
Yinet Jiménez Hernández
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14 Mayo 2018
14 Mayo 2018
hace 6 años
En la tarde de este lunes, el intelectual franco-español Ignacio Ramonet presentó en el Teatro La Caridad la cuarta edición de su libro Cien horas con Fidel. En esa coyuntura, recibió de manos de las máximas autoridades provinciales la réplica del Escudo de Armas de Villa Clara, uno de nuestros máximos galardones.
Moderado por Luis Morlote Rivas, vicepresidente primero de la UNEAC, las palabras preámbulo estuvieron cargadas de un profundo cariño hacia el amigo que escribió una de las biografías del Comandante más queridas por el pueblo cubano y por el propio biografiado.
«El que Ignacio Ramonet haya accedido a la petición de volver a publicar Cien horas con Fidel, el hecho de que haya trabajado en que no fuera una copia de la edición anterior, hace que este libro salte inmediatamente a combatir. Yo creo que en este libro los jóvenes van a encontrar un Fidel que aún tiene muchas cosas que decir », comentó Luis Morlote Rivas en agradecimiento al autor.
Por su parte, Ignacio Ramonet hizo énfasis en el arduo trabajo de la edición ampliada, que incluyó nuevos materiales: los textos «Dos horas más con Fidel » y «Fidel Castro y la represión de los intelectuales », esta última una reflexión sobre la censura sufrida por Ramonet tras la publicación del libro; así como un índice de nombres y lugares mencionados por Fidel en su conversación, y una cronología que articula los sucesos de la Revolución cubana con los acaecidos en el seno del contexto global.
Ramonet afirmó que Fidel Castro nunca se negó a tocar los temas candentes de nuestra historia contemporánea: la persecucion de los homosexuales a principios de los años 60, el racismo después de la Revolución, el asunto del fusilamiento de Ochoa, etc. «Fidel le consagró muchas horas a este libro. Fue releído por él, fue reescrito por él, sin eliminar una pregunta », agregó.
«Nos pasamos la vida criticando y es legítimo criticar. Lo que no es justo es que ha habido tantas críticas contra Fidel y nunca se le ha dado la palabra al acusado. Yo dije: vamos a jugar al acusado, yo le voy a hacer las preguntas y veamos cuáles son sus argumentos. Evidentemente Fidel quería esa plática », argumentó el también amigo del Comandante.
La presentación de esta cuarta edición, asistida por importantes personalidades de la cultura nacional como el ministro de Cultura Abel Prieto, completa un periplo de exposiciones que tuvieron como objetivo revitalizar un texto que hace doce años resume parte importante de nuestra historia nacional.