La Brigada de Instructores de Arte José Martí nació el 20 de octubre de 2004. Desde la Plaza de la Revolución Ernesto Che Guevara quedó constituida por el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz.
Los llamó el ejército de la cultura, porque con música, pinceles, danza y teatro inundarían cada rincón del archipiélago. Desde entonces trabajan en escuelas, comunidades y centros de atención a los adultos mayores.
«El dilema de si serán artistas o no, nos ha acompañado. Hoy cada vez más es común escuchar que son artistas de la hermosa profesión de enseñar arte al pueblo. Ellos han descubierto en el trabajo con los niños un campo de la pedagogía que los enriquece, y no tiene por qué existir contradicción entre una función y otra. Tampoco habría que mutilar la posibilidad de desarrollar su obra artística si son capaces de cumplir con sus deberes como instructores de una escuela », dijo Fidel aquella noche.
La vida demostró que muchos siguieron el camino de ser artistas, mientras otros se mantienen en la profesión de enseñar. De tal manera con la llegada de los instructores de arte se consolidó la escuela como la institución cultural más importante de la comunidad.
Los resultados de su labor se reflejan en el seno de la familia. El trabajo de estos profesionales se proyecta más allá de la institución escolar, y depende del vínculo con el resto de las instituciones culturales y sociales de la comunidad. Así lo vaticinó Fidel y así se ha cumplido durante los 16 años de funcionamiento de la Brigada de Instructores de Arte José Martí.