«Es importante elevar los niveles de producción en nuestro país, incluyendo las montañas», precisó el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido y vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa, ante la discusión de los resultados del Programa de Atención al Plan Turquino y la Ruralidad en Cuba.
Para obtener más divisas, enfatizó, hay que producir «más café, más miel; hay que aportar más minerales, más servicios».
Afirmó que tienen que funcionar los mecanismos que se han aprobado en el Plan Turquino, y «hacer un mayor esfuerzo para meternos dentro; sobre todo en las estructuras de las asambleas municipales, los consejos de educación, en la estructura del Gobierno».
Respecto al citado Plan, trascendió que se ha logrado diseñar un mercado minorista de insumos en moneda libremente convertible, el cual incluye piensos, fertilizantes, pesticidas, herramientas, sistemas de riego y sus partes, y piezas, entre otros.
Se dio a conocer, además, que en 98 comunidades de las zonas rurales y montañosas se realizaron un importante número de acciones relacionadas en la transformación de barrios.
Resaltó también que existen nueve proyectos de inversión extranjera que se ejecutan en los municipios del Plan Turquino, que impactan en las producciones básicas de estos territorios y en los medios de trabajo, que mejoran las condiciones para el cumplimiento del autoabastecimiento local y la sostenibilidad de estas comunidades.
Igualmente, se trabaja en el anteproyecto de la futura Ley General de la Vivienda, en la que se mantendría la posibilidad de disponer de una casa en la ciudad y otra en el campo, en concepto de propiedad; y la concepción en la política de la Vivienda de la construcción de viviendas rurales, oficializado en las tipologías constructivas aprobadas por el Ministerio de la Construcción (Micons).
Por su parte, el vice primer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca expuso las bases y objetivos del programa de revalorización de la ruralidad en Cuba, enfatizando el Plan Turquino como pilar fundamental de esta iniciativa.
En su intervención, Tapia Fonseca subrayó que esta política se fundamenta en los principios del pensamiento del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y reconoce los logros en los primeros años de la Revolución.
Asimismo, destacó la importancia de programas como la electrificación y la construcción de consultorios y escuelas en áreas montañosas, que han sido vitales para mejorar la calidad de vida de los habitantes de estas regiones; e hizo hincapié en que la Comisión Nacional para atender la ruralidad tiene un papel crucial en la implementación del Plan Turquino, el cual se extenderá a los 54 municipios del país.
«No están solos, cada municipio tiene responsabilidades específicas y debe trabajar en conjunto para fortalecer esta política», valoró.
Entre los temas discutidos, Tapia Fonseca resaltó la importancia de mejorar las vías de acceso en las comunidades rurales. «Es imperativo que el próximo año podamos reparar los viales y definir un presupuesto claro para ello», comentó, haciendo referencia a la necesidad de un transporte eficiente que incluya también el sector de Salud Pública.
Además, se planteó la necesidad de rectificar el programa escolar, sugiriendo que se retomen las escuelas con pocos alumnos en aquellas comunidades donde las condiciones lo permitan. «Debemos aprovechar lo que ya teníamos, y adaptarlo a las necesidades actuales», subrayó. (Claudia Thalía Suárez Fernández)