El lanzador sagüero ganó los tres partidos frente a Santiago de Cuba, que le permitieron al equipo Villa Clara su pase a la semifinal de la temporada 2002-2003.
Momentos del dramático quinto juego entre el equipo Villa Clara y Santiago de Cuba, correspondiente a los al play off de cuartos de final, ganado por los anaranjados en el estadio Augusto César Sandino. (Foto: Captura de video)
Osvaldo Rojas Garay
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10 Febrero 2021
10 Febrero 2021
hace 3 años
Cuando recuerdo la XLII Serie Nacional, 2002-2003, lo primero que me viene a la mente es la hombrada de Vladimir Hernández Solás, el serpentinero que con una hazaña inédita logró acreditarse las tres victorias de los anaranjados en el play off de cuartos de final contra Santiago de Cuba, que permitieron el acceso de Villa Clara a la semifinal de aquella temporada.
Los indómitos ya no tenían en sus filas a Orestes Kindelán ni a Antonio Pacheco, pero no dejaban de ser un elenco peligroso con Rolando Meriño, Pedro Poll, Gabriel Pierre, Luis Miguel Navas, Rey Isaac, Reutilio Hurtado, Fausto ílvarez, Alexei Bell, y un excelente cuarteto de lanzadores integrado por Norge Luis Vera, Ormari Romero, Danny Betancourt y Osmel Cintra.
Si Villa Clara logró rebasar aquel enfrentamiento se debió en buena medida a la proeza del derecho Vladimir Hernández Solás, quien guio a su equipo a conquistar el boleto para la siguiente etapa, al obtener todas las victorias en el tope con la fuerte toletería santiaguera.
En este segmento de cuartos de final, que era de cinco a ganar tres, las Avispas arrancaron exitosamente el miércoles 9 de abril, con sonrisa de Ormari Romero, 10 a 9, pese a soportar 14 metrallazos y las 9 anotaciones de los rivales.
Vladimir igualó el tope al superarlos, 7 a 0, el día siguiente. Luego Norge Luis Vera con su victoria número 100 en series nacionales, adelantó a los montañeses, al imponerse, 6 a 3, el sábado 12 de abril.
Mas Vladimir niveló las acciones, al salir airoso en el cuarto desafío, 11 a 6, ante Ormari Romero. El serpentinero ganador tiró siete entradas con comodidad y cuando toleró dos en el séptimo inning, ya agotado por el fuerte calor dominical en el «Guillermón Moncada », Víctor Mesa lo reemplazó en el octavo por Luis Borroto, quien ponchó a tres contrincantes antes de que Alexander Jorge le sacara la esférica con uno a bordo. El zurdo Saidel Beltrán sacó el out 27, al dominar al peligroso Fausto ílvarez.
El martes 15 de abril de 2003, ambos equipos salieron a la grama del estadio Sandino, en Santa Clara, en un choque de vida o muerte, en busca del segundo boleto semifinalista de la zona oriental. Fue un partido tenso, en el que después de ir abajo en el marcador, 2 a 3, la tropa de Franger Reinaldo tomó el mando con dos carreras en el séptimo; sin embargo, en el final del octavo, los locales también fabricaron dos que resultaron decisivas para imponerse, 5 a 4, aunque los santiagueros emplearon a su astro Norge Luis Vera. De esta forma Vladimir concretó una proeza única, al acreditarse los tres triunfos posibles de su equipo.
Vladimir no solo metió a Villa Clara en la disputa del banderín del circuito del Este, sino también fue clave en el éxito frente a Granma, al obtener dos triunfos y así apoyar el pase de su equipo a la pugna por el título contra Industriales, conjunto que finalmente conquistó el gallardete.