
Con el objetivo de crear actitudes de rechazo a las drogas, psicotrópicos y sustancias de efectos similares, por estos días trascendió en Villa Clara y todo el país el ejercicio estratégico de prevención y enfrentamiento a las drogas, con acciones promovidas por un equipo multidisciplinario integrado por los ministerios de Educación y Educación Superior, Justicia y Salud Pública, entre otras instancias involucradas en la tarea.
La Dirección Provincial de Justicia, uno de los organismos implicados, trabaja en la capacitación y asesoramiento de cuadros, trabajadores y directivos, y del personal de unidades que prestan servicios a la población, a fin de reducir los riesgos y efectos nocivos que pudiera acarrear el consumo de las drogas y de cualquier otra sustancia similar.
Solidaria con esta labor, la Dirección Provincial de Salud mantiene el control, tanto de los medicamentos como de las personas que, por su padecimiento, consumen fármacos con un efecto similar al de las drogas.
En esta batalla, el Ministerio de Educación tiene un alto protagonismo, a tono con la Resolución 15 de 2019, que norma un programa educativo preventivo en función de fortalecer el rechazo al consumo de estupefacientes.
El ejercicio promovido por estos días se extendió a centros estudiantiles de toda la provincia situados en zonas rurales, costeras, y comunidades de la montaña, además de lugares proclives al consumo y tenencia de dichas sustancias, e incluyó a estudiantes, familiares y profesores, en aras de crear conciencia sobre las consecuencias de este mal en jóvenes y adolescentes que, por su inexperiencia, se aventuran a consumirlas.
Charlas educativas, clases prácticas, y la proyección de audiovisuales a estudiantes, familias, docentes y la comunidad han tenido un impacto positivo al profundizar en una problemática que urge erradicar en nuestra sociedad.
Asimismo, se fomentó la formación de promotores de Salud a partir del quinto grado, para divulgar temas vinculados con esta y otras tendencias negativas, como el alcoholismo, el tabaquismo y el embarazo en la adolescencia.
Al ejercicio se sumaron la Fiscalía y el Ministerio de Salud Pública, entre otros organismos e instituciones, para trabajar de manera conjunta, con una alta aceptación y receptividad en la familia, al permitirles dialogar con sus hijos sobre el tema y argumentarse.
En este empeño se sumó el Centro de Bienestar de la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas, donde Reinier Martín González, su coordinador, se refirió a los estrechos vínculos que mantienen con la Comisión Universitaria de Prevención del Uso Indebido de las Drogas, que trabaja en función de la prevención de problemáticas presentes en la casa de altos estudios.
Martín González enfatizó que, a partir de los estudios de diagnóstico, luego de la pesquisa de los grupos de riesgo, se proyecta un grupo de acciones a ejecutar durante todo el curso, como la capacitación de profesores guía e instructores educativos para que puedan intercambiar con los estudiantes en las brigadas y realizar debates sobre el tema.
El coordinador del Centro de Bienestar de la UCLV destacó, asimismo, que el 18 de junio, Día Mundial contra las Drogas, desarrollarán una jornada educativa de prevención de las drogas focalizados en los grupos de riesgo. En octubre promoverán la Jornada por el Día de la Salud Mental, donde retomarán el tema, y en noviembre, la de prevención de la violencia de género, fecha en la que volverán a tratar el asunto.
La institución capacita a los estudiantes de Psicología y de otras especialidades para desplegar actividades en las brigadas y la residencia estudiantil, mediante charlas educativas y consultas de orientación psicológica a alumnos y profesores que ya fueron detectados en la categoría de riesgo.
En el 2018 el Ministerio de Educación Superior diseñó el programa ministerial para la prevención del uso indebido de las drogas en el contexto universitario, lo que refuerza el accionar del Centro de Bienestar, con más de diez años de experiencia.
Se trata de sumar fuerzas en el empeño de erradicar las drogas y hacer cumplir la política del país de tolerancia cero con el silencioso flagelo.