La noticia se expandió como polvorín. El 5 de junio pasado comenzó la venta liberada de gas licuado en Santa Clara. Con tarjeta de abastecimiento mediante, los contratos comenzaron a realizarse sin contratiempos. Tampoco la venta del producto presentaba dificultades.
Sin embargo, la avalancha pudo más que los pronósticos. En menos de 20 días las cifras de contratos superaron las cantidades previstas, y más de 600 cilindros de gas licuado eran vendidos diariamente en la capital provincial. Entonces, se afectó el reaprovisionamiento de cilindros, que al inicio de las contrataciones estaba cubierto al 80 % y se iría completando gradualmente.
La situación era similar en los restantes siete territorios del país donde, simultáneamente, se inició la venta liberada de gas licuado. De ahí que la Unión Cubapetróleo emitiera una carta el 24 de ese mes con indicaciones precisas a los directores de empresas comercializadoras de combustibles.
En el texto aparecía, como primer punto, limitar la contratación a un contrato por núcleo y arrendar un cilindro por contrato. No obstante, las autoridades pertinentes deberían informar que a partir de septiembre se podrán concertar el segundo contrato y el arrendamiento de hasta dos cilindros por contrato.
Con este punto queda claro que la medida es temporal. Aunque eso no ha sido suficiente para detener las especulaciones de la población: que si lo dicho anteriormente por las autoridades de Cupet era una falacia; que por qué ahora se echaban para atrás, que si esto, que si aquello…Los rumores fueron varios y las colas en los puntos de contratación aumentaron.
Para verificar cuánto hay de cierto en el decir de la calle, nos acercamos a la Empresa Comercializadora de Combustible en Villa Clara. Allí dialogamos con Gustavo Rodríguez Cordero, máximo dirigente de la entidad.
«Hoy existen 22 000 familias cocinando con gas, gracias al inicio de la venta liberada. Si tenemos en cuenta que en el municipio existían 65 000 clientes de keroseno, podemos calcular los beneficios. Aunque es cierto que la demanda superó la disponibilidad de cilindros y en la actualidad debemos cumplir con las indicaciones emitidas por la Unión Cubapetróleo, las cuales, insistimos, son temporales ».
Según Rodríguez Cordero, los contratos finalizaron en su primera etapa el viernes 7 de julio. Se retomarán el 17 del presente mes y los interesados deberán acudir al punto de contratación que se habilitará en el cine La Rotonda, en el reparto Vigía. Luego, en septiembre, se realizarán en la Casa Comercial, sita en la calle Juan Bruno Zayas.
Sobre las colas y los coleros en los puntos de venta, el directivo reconoció que al inicio no faltaron quienes se aprovecharan de la situación para vender los turnos. Sin embargo, el problema fue atajado a tiempo, pues las listas para la compra las elaboran los propios trabajadores de Cupet, quienes dan un lugar seguro al interesado para adquirir su gas licuado un día específico.
No obstante, existen atrasos respecto al cronograma de venta. En el momento de redactar este comentario, el expendio correspondía a quienes habían realizado el contrato el día 14 de junio, por causa de la excesiva cantidad de personas que se han contratado por días.
Las autoridades de Cupet en la provincia se muestran optimistas y solicitan a la población no desesperarse. Aunque la inseguridad parece razonable, pues los inconvenientes surgidos con la venta liberada pasan, entre otras cuestiones, porque los pronósticos no cubrieron la realidad respecto a un asunto de sumo beneficio para las personas, como lo es cocinar con gas licuado.
No obstante, como reza el refranero popular, lo último que se pierde es la esperanza. Esperemos, pues, que el gas licuado en Santa Clara llegue a todo aquel que lo necesite.