
Acento donde lo lleva, elogios (muy pocos) a lo que lo merece, y críticas constructivas para educar y hacer que las necesidades ciudadanas se minimicen, constituyeron herramientas para el análisis de los programas prioritarios de la población en los municipios de Corralillo y Quemado de Gí¼ines.
El Consejo de Defensa Provincial (CDP), sus respectivos homólogos municipales y los organismos involucrados incluyeron como tema básico el panorama que presenta la producción de alimentos y lo mucho que debe hacerse a fin de responder a las demandas del pueblo, ante una tarea que muestra innumerables insatisfacciones.

Por ello, el autoabastecimiento local, la revisión de la entrega de tierras ociosas y las irregularidades manifiestas con los contratos no faltaron en el «ultrasonido », que no descartó las áreas improductivas en las que libremente crece y se desarrolla el marabú, en detrimento de lo que verdaderamente pudiera aportar al programa alimentario.
En cuanto a la agricultura urbana, Corralillo presenta deficiencias marcadas, y todo ello bastó para que Yudí Rodríguez Hernández, presidenta del CDP y primera secretaria del Partido en Villa Clara, señalara algunas de las deficiencias y quejas que plantean los pobladores en torno a las disponibilidades de alimentos.
La existencia de pocos productos en los mercados, los altos precios de estos, sobre todo de la carne de cerdo también escasa, y los desbalances entre la cabecera municipal y lo que reciben las comunidades, entre muchas otras, llevó a que la máxima guía política en la provincia expresara: «El dirigente que no piense como país está imposibilitado de ejercer sus funciones ».
«La comida dijo es tarea de todos. El pueblo no come números (refiriéndose a las cifras de los llevados y traídos planes), necesita alimentos, y no se puede seguir bajo el concepto de esperar el barco que venga del extranjero, porque el país no tiene el financiamiento requerido para pagar las altas tasas a nivel mundial ».
En el examen contundente se habló de la necesidad de producir e incorporar el carbón ante las agudas limitantes de combustible, y llamó a detenerse en la cartera de productos exportables como otra de las vías de propiciarle divisas a la nación.
Otra imagen palpable la ofrecen los organopónicos vacíos, lo que impone mover el pensamiento, adelantarse a las realidades, «porque le estamos dando al pueblo una partícula de alimentos », enfatizó Rodríguez Hernández.
El municipio del noreste debe agilizar sus acciones ante los incumplimientos agrícolas, en tanto los módulos pecuarios son insuficientes, y habrá que valorar la manera de producir pienso animal con iniciativas locales.
La cría de aves rústicas demanda también atención, a fin de incentivar la producción de huevos, y en cuanto a la leche, Corralillo presenta un déficit y debe aplicar medidas para cumplir el plan al término del año.

Se reclamó con fuerza la revisión de las contrataciones, pues urge que el uso y tenencia de la tierra demuestre efectividad, sin el rejuego que se sabe existe entre los planes y lo reflejado como cifras reales. En este sentido, Alberto López Díaz, vicepresidente del CDP y gobernador de Villa Clara, demostró, calculadora en mano, que los sobrecumplimientos y los números solo llenan un papel, pero distan de la realidad.
Y quedó claro que la Empresa Agropecuaria y Azcuba resultan los principales responsables de abastecer a este pueblo de comida, y después, las formas productivas que deben incorporarse.
«A los embalses hay que prestarles atención a fin de diversificar la comida », sentenció López Díaz.
Aspectos relacionados con el desarrollo local, el panorama energético y el estado de la vivienda no faltaron en las valoraciones. En este último tema se constata la necesidad de revisar mejor los locales estatales que se encuentran subutilizados. No para beneficiar a un jefe, como quedó claro, sino para satisfacer las necesidades de los propios trabajadores de la entidad.
Punto clave fue el análisis del enfrentamiento a la COVID-19, con énfasis en la calidad de las pesquisas como elemento básico en esta etapa. Hay que estar vigilantes las 24 horas e impedir la mínima negligencia.
Corralillo, un pueblo noble y trabajador de 25 000 habitantes, tiene posibilidades de aportarle más a la provincia y a sus habitantes, según concluyeron; mas tendrá que revisar subsidios de años anteriores que no han sido ejecutados, borrar los esquemas del consumismo y pasar a la acción de productores, encontrar fuentes de empleo y pluriempleo, sin olvidar que la vida necesita atemperarse a las exigencias de estos tiempos.
En la tierra del Guajirigallo
Con un panorama que no difiere mucho de su vecino territorial, Quemado de Gí¼ines también debe insistir en sus 15 módulos pecuario, y en los incumplimientos en la entrega de carne vacuna por parte de algunas bases campesinas.

Habrá que revisar contratos, compromisos de entrega, y analizar profundamente a los negligentes, porque no es la hora de seguir viendo la agricultura en números ni de dar la espalda a las legislaciones vigentes.
En el caso de los proyectos de desarrollo local, se centran en las minindustrias como renglón prioritario y pueden resolver muchas de las limitantes actuales para la familia cubana, a pesar de que aún no se encuentran en funcionamiento, mientras el territorio dispone de otras carteras en proyecto.
En cuanto al plan de siembra de caña existen atrasos, y no es menos cierto que parte de la tierra no está lista. En este sentido intervino Yudí Rodríguez con una estocada definitoria al plantear que «la industria azucarera no puede continuar dándole dolores de cabeza a este país con los incumplimientos en la siembra y en la producción, siempre con justificaciones. Esto es inconcebible en la provincia de más azúcar en Cuba ».
Y la balanza popular también señala entre sus inconformidades la carestía de algunos productos que no bajan de precio, así como las pocas ofertas en los merenderos estatales. En el caso de la placita del batey José R. Riquelme se señalan únicamente las disponibilidades de cebolla, por solo citar un ejemplo.

La presidenta del CDP, Yudí Rodríguez, insistió en eliminar lo que llamó el verticalismo absoluto, porque no se concibe la existencia de parcelas delimitadas por tal o más cual organismo, cuando estas responden al pueblo.
El municipio tuvo sobregiros en el consumo de electricidad en julio y agosto, pero ya se observan ahorros, algo que deberá continuar en lo que resta de año.
La comisión evaluadora le dio a Quemado de Gí¼ines la condición de estancada en lo concerniente a la vivienda, a pesar de que trabajan en las afectaciones ocasionadas por tres eventos climatológicos en los últimos años.
A criterio general, el municipio puede ser pilar en el autoabastecimiento local, por lo que debe insistir en el aporte de alimentos. Si bien Quemado de Gí¼ines tiene un polo productivo sobresaliente en lo relacionado con el plátano. vale recordar que no solo de este vive el hombre y el plato cotidiano hay que enriquecerlo con otros renglones nutritivos.