Soberaní­a alimentaria y autoabastecimiento: prioridad de la municipalidad

Como una polí­tica principal de gobierno, las municipalidades avanzan hacia estrategias a corto plazo que permitan ofrecer respuestas positivas a la falta de alimentos.

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Agricultura urbana en Vila Clara, Cuba.
La agricultura suburbana constituye uno de los pilares básicos de la soberanía alimentaria. Potenciarla es una máxima del gobierno. (Foto: Carlos Rodríguez Torres)
Yinet Jiménez Hernández
Yinet Jiménez Hernández
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01 Octubre 2020

Soberaní­a alimentaria, autoabastecimiento, programa de agricultura suburbana y desarrollo local son términos manejados por cada uno de los consejos de defensa, para hacer frente a la crisis económica agudizada por la pandemia y el bloqueo impuesto contra  Cuba.

Como una polí­tica principal de gobierno, las municipalidades avanzan hacia estrategias a corto plazo que permitan ofrecer una respuesta a la totalidad de la población. Si bien las autoridades gubernamentales y los coordinadores del programa alimentario insisten que aún falta mucho por sistematizar, Villa Clara comienza a dar los primeros pasos.

Por ejemplo, Encrucijada ofreció un parte de cómo están procediendo para el cumplimiento de los acuerdos. A través de trabajos voluntarios y movilizaciones masivas, la producción de alimentos de ciclo cerrado, los encadenamientos productivos, entre otros aspectos, son estrategias claves y decisivas para llegar a los 5 kg de proteí­nas per cápita.

«Pensar como paí­s es una máxima que hay que concretarlo en la base, no es una consigna vací­a », aseguró Yudí­ Rodrí­guez Hernández, presidenta del Consejo de Defensa Provincial (CDP) de Villa Clara .

Añadió que una de las amenazas más comunes en la provincia es que los jefes de las cooperativas no dominan los indicadores de producción de su propia entidad. Ello impide el cumplimiento de parámetros básicos y frena la aplicación inmediata de las estrategias.

El municipio de Camajuaní­ también rindió parte de sus estrategias. Aunque este último ha avanzado con pasos más firmes en el cumplimiento de la distribución de alimentos y sus aportes, tanto a la capital provincial como la capital nacional, aún pueden alcanzar logros en este sentido.

«Nosotros vamos a tener lo que seamos capaces de producir », sentenció Rodrí­guez Hernández en  la rendición de cuentas del programa alimentario en ambos municipios villaclareños.  

De modo que el análisis del incumplimiento de responsabilidades por parte de algunas entidades debe ser analizado con mano dura, al igual que los estados de opinión y las respuestas que se dan al pueblo.

Otros aspectos analizados en dichos territorios fueron el programa de la vivienda, polí­tica que necesita de una producción alternativa de materiales, y del ahorro energético, hoy con el hándicap de las grandes pérdidas.

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