El Banco de Crédito y Comercio (Bandec) de Villa Clara pone a disposición de las personas naturales una modalidad de crédito para la compra de bienes del hogar, como muebles, equipos de cocción y bienes personales, que entró en vigor en marzo del 2023, bajo el amparo del Decreto Ley 289 y la Resolución 99 del 2011, así como la 276 del 2021 del Banco Central de Cuba.
Para conocer detalles sobre este tipo de crédito, Igor Montera Sánchez, jefe del Departamento de Banca Empresa de la Dirección Provincial de Bandec, accedió a una entrevista para Vanguardia.
«La nueva modalidad de crédito es aplicable a las unidades de Comercio de la provincia y establecimientos de los nuevos actores de la economía. Pueden ser objeto de este crédito los trabajadores del sector estatal y no estatal, y jubilados que cobran por tarjeta magnética o nómina electrónica de Bandec.
«Tiene como particularidad que la disponibilidad del crédito se sitúa en una tarjeta magnética sin mediar efectivo, para que las personas puedan operarla por un POS (terminal punto de venta) o código QR, a través de las pasarelas de pago Transfermóvil o EnZona.
«Si la unidad de Comercio o trabajador por cuenta propia (tcp) donde el usuario desea realizar la compra, no tiene ninguna de estas dos opciones, se procederá a la elaboración de una prefactura. En este caso, la persona acude a la sucursal bancaria para que esta emita un cheque, y de esta forma, se transfiere el dinero a la cuenta de la entidad comercial o tcp, sin mediar efectivo».
El especialista destacó que esta forma de pago tiene como ventaja que permite adquirir cualquier otro artículo, siempre y cuando se encuentre en la categoría de un bien del hogar u objeto personal.
«Al interesado se le crea una línea de crédito sin necesidad de utilizar el financiamiento en un único momento. Es decir, puede realizar determinadas compras con un crédito mínimo de 5000 pesos, cuyo monto máximo está determinado por la capacidad de pago que tenga. Cada compra deberá tener un costo mínimo de 1000 pesos.
«Previo al otorgamiento del crédito, la sucursal bancaria procederá al estudio de los ingresos personales del cliente y determinará cuánto puede prestar, así como el monto a amortizar, cuya mensualidad será como mínimo de 50.00 pesos. El máximo dependerá de la capacidad de pago.
Montera Sánchez señaló que los interesados en este servicio deberán presentarse en la sucursal bancaria donde opera su centro de pago. Si es un trabajador estatal, a la sucursal donde opera su cuenta corriente y créditos personales, y si es un tcp u otra forma de gestión, donde tenga su cuenta corriente.
«Los créditos se ponen a disposición de la persona en una tarjeta magnética. Si el cliente ya posee una tarjeta en moneda nacional —de ahorro, jubilación, salario o formación de fondos—, el crédito puede situarse en esta tarjeta, que a partir de ese momento tendrá una dualidad, al funcionar como tarjeta de débito y de crédito. También podrá solicitar una tarjeta solamente para el crédito».
El especialista subrayó que en este tipo de crédito, en dependencia del análisis que se haga y del monto que la persona solicite, deberán presentarse al banco las mismas garantías establecidas en las regulaciones, como fiadores —personas que proceden al pago de la deuda si el solicitante no puede pagar por determinado motivo—, o tener en garantía prendas, vehículos o cuentas de ahorro.
Asimismo, expresó que los intereses oscilan entre un 3 y un 10.5 %, en dependencia del tiempo y monto pactado con el cliente. Si el crédito se va a recuperar en poco tiempo, el interés es menor, y si lo hace en diez años, será mayor.
Recalcó, además, que la persona elige el orden de prelación a la hora de operar la tarjeta que tendrá una doble función. Por ejemplo, cuando el cliente va a comprar un artículo y previamente informa al banco que va a utilizar el crédito en la compra de un refrigerador y desea completar el resto con su salario, o viceversa, primero utiliza su salario y después el crédito.
La persona que solicita el crédito deberá tener ingresos lícitos demostrables. De ser un tcp, demostrará su actividad y la operatividad de su cuenta. Si es un trabajador estatal, se le entregan las planillas a llenar en el centro laboral donde tiene su historial de ingresos de los últimos 12 meses, para constancia del banco y descontar la amortización.
La línea de crédito podrá emplearse de manera paulatina hasta que se agote. Una vez que esté a disposición del cliente, este deberá realizar las compras en un plazo de 365 días. La disposición del dinero no ejecutado en ese tiempo se cancela.