
A pesar de haber integrado la selección adulta a los XVII Juegos Panamericanos de Toronto y la Liga Mundial, en 2015 y al NORCECA sub 21 y la III Copa Panamericana de igual categoría, en la cual acaparó los máximos lauros como opuesto y en el servicio, los éxitos del santaclareño Miguel David Gutiérrez Suárez pasaron un tanto inadvertidos en la provincia.
Su caso se me parece al del boxeador Osvary Morrell que en noviembre del pasado año en poco más de una semana saltó del anonimato a la fama al convertirse en monarca del orbe entre los bisoños.
Gutiérrez acaba de regresar junto al esperanceño Marlon Yang del XIX Campeonato Mundial Sub 21 celebrado en Brno, República Checa, donde la Mayor de las Antillas con una presea de plata igualó su mejor escaño en citas de este tipo conseguido en 1987 y 2009, lo que transcurridos seis años del metal de bronce alcanzado por el plantel sub 19 en 2011, vuelve a colocar al voleibol cubano en el podio en una justa del planeta.
«Metralla » como le dicen sus compañeros hizo honor a su apodo en la porfía mundialista. Por nuestra cuenta encabezó la puntuación en 5 de los 8 partidos que desarrolló el equipo y culminada la lid con Polonia levantando el cetro por tercera vez, lo escogieron como el mejor opuesto del certamen.
«No tengo palabras para expresar lo que representa ese premio para mi », confesó a Vanguardia este joven de 20 años de edad que comenzó en el atletismo y terminó siendo voleibolista a sugerencia del entrenador Rolando Salas.
«Creo que esa distinción se la debo al equipo. Individualmente me la dieron a mi, pero en realidad la merecimos todos por la lucha y entrega en cada juego, nunca nos dejamos caer, siempre jugamos alegres. Pienso que la clave de la medalla estuvo en la unidad, eso es algo que incluso reconocieron otros equipos que compitieron en el mundial. »
- ¿Cuál era la meta inicial del equipo?
-El propósito era ubicarnos entre los ocho primeros y así superar el puesto 13 del mundial anterior.
- ¿En qué momento pensaron en que podían ser medallistas?
-Cuando avanzamos a la segunda ronda nos dimos cuenta que podíamos colarnos entre los cuatro primeros. Los entrenadores nos comunicaron que el pueblo estaba siguiendo la actuación de nosotros, esto nos dio mucho ánimo y nos impulsó a obtener un buen resultado.
- ¿Qué sentiste cuando tuviste que ir a la banca?
-Fue muy difícil. Le habíamos ganado a Irán el primer tiempo, pero no estuve a la altura de los partidos anteriores y en el segundo set me sustituyeron por mi comprovinciano Marlon Yang. No hallaba como estar en el banco. Veía que al equipo le hacía falta un opuesto, y yo estaba allí fuera de juego, sin poder hacer nada.
«Pero me sobrepuse de ese mal momento y cuando me reincorporé le marqué 24 puntos a China, 19 a Rusia en semifinales y 15 a los polacos en la discusión del oro. »
-Llevas el número 10 en la camiseta, ¿lo escogiste tú?
-No, en realidad me lo dio el entrenador Rodolfo Sánchez, era el único que había y a mi me gusta. Sánchez me dijo que ese es un número que llevan muchas de las grandes figuras en el deporte.
- ¿Algún jugador de referencia en el voleibol?
-Disfruto como juega el francés Earvin N'Gapeth. Antes del partido final estuve observando algunos de sus videos.
-Hace varios años Villa Clara tuvo con Raúl y Roberto Vilches una pareja de hermanos en el deporte de la malla alta, esto pudiera repetirse con los Gutiérrez.
-Tengo un hermano de 15 años que anda tras mis pasos. Cuando me encontraba en el mundial recibí un correo de él que me conmovió. Me dijo que estaba muy contento con mi actuación, que iba a tratar de ser como yo, para ver si un día podíamos integrar juntos el equipo Cuba.
- ¿Próximos torneos?
-Dentro de pocos días participaremos en la Copa Panamericana de mayores y más adelante en agosto iremos al mundial sub 23 que se realizará en Egipto. Seguramente asistiremos una buena cantidad de los que fuimos a Brno. Luego de esta medalla de plata es de esperar un resultado importante en ese torneo, aunque no será fácil superar el cuarto lugar del 2015.