
Yalexis es un veguero que jamás dice que no. Desde que fomenta una plantación, con la convicción de que «al mal tiempo buena cara », sale cada día hacia el campo que rodea su entorno agrícola. En Santa Elena, en la carretera de Matagúa a Báez, radica la finca donde asiste anualmente el cultivo de tabaco en rotación con sembrados de viandas, granos y frutales.
En el coto agrícola de la familia, ubicado en una cuesta cercada a la Sierra de María Rodríguez otrora centro ganadero, todavía queda espacio para atender crías de bovinos y ovino-caprino, y alguno que otro cerdo siempre se contempla en sus alrededores.

Ahora Chaviano Reyes, socio de la cooperativa de créditos y servicios Reemberto Machado, realiza su cosecha 25 de tabaco a sol, y augura excelentes resultados luego del beneficio de la hoja. No obstante, como a otros villaclareños, los contratiempos de la naturaleza le jugaron una mala pasada en noviembre último, cuando las insistentes lluvias destruyeron las superficies preparadas para recibir las simientes de la solanácea.
Otra debacle apareció con las afectaciones en parte de los aposentos donde ampararía la hoja que cortaría a cuchilla, como la tradición del tabaco sol en palo. Eso obligó a Chaviano Reyes a disminuir la futura área de siembra, y a iniciar la plantación fuera del mes óptimo para este cultivo.
Tuvo otro inconveniente: no aparecían las posturas, y tuvo que esperar a que los suministradores hicieran los acostumbrados semilleros. Entonces nuevamente labró el suelo, pasó grada, surcó y partió la superficie que destinaría a tabaco. En enero la plantación fue reemprendida a partir de la garantía de abastecimientos de fertilizantes y químicos idóneos para el fomento del cultivo.
Durante el período previo no dejó de atender y fomentar otras siembras, entre las que abundan cultivos varios para ventas al Estado, así como de pastos y caña de azúcar destinados al sostenimiento de los animales. Los méritos productivos alcanzados por Chaviano Reyes trascienden en el sureño municipio, y le valieron para figurar como Personalidad Distinguida por el Gobierno de Villa Clara, galardón conferido a 30 campesinos en diciembre último.
Expandir los rumbos

Los entuertos que precedieron la actual campaña obligarán al cosechero a cambiar el rumbo para readecuar las siembras de tabaco. Por el momento está forzado a reparar con inmediatez la casa de beneficio, en la cual ahora solo puede albergar hojas en dos aposentos. Los tres restantes quedaron inutilizados por roturas en la estructura del techo. Cree que en lo perspectivo la empresa La Estrella, encargada del cultivo en la provincia, «escuchará el reclamo y facilitará la madera idónea para efectuar la construcción, y también atenderá la posibilidad de hacer semilleros en la finca para abastecer de posturas a 11 campesinos que asumen en la cooperativa vegueríos como agricultura temporal », precisó.
Aquí «no se pierden ni las mañanitas » hojas inferiores de la planta, dijo. El año pasado se plantaron tres hectáreas con unas 105 000 posturas de variedades Corojo y Sancti Spíritus con las cuales se entregaron 4 toneladas de la rama seca de excelente calidad. Imagine usted el rendimiento obtenido a partir de una extrema dedicación a los sembrados. En la actualidad repitió la siembra con iguales tipos de simientes.
Similar aporte tuvo con las ventas de cultivos varios, granos y frutales, así como de donaciones de alimentos a centros de aislamientos de la provincia en la lucha contra la COVID-19, una reiterada muestra de altruismo que también anima a otros campesinos de la zona. De esa forma contribuyen con el país en la sustitución de importaciones y el enfrentamiento a la pandemia. Una entrega de alimentos proyectan por estos días al Hogar de niños sin amparo familiar de Manicaragua, tal como hicieron agricultores homólogos en ocasiones anteriores.

Ya «usted ve, hasta las hortalizas, con plantaciones de col, tomate y berenjena, comienzan a fomentarse en la finca. También hay yuca, boniato, frijol y guayaba. Además vendrán en cualquier momento los sembrados de fruta bomba y de piña en suelos no aptos para el desarrollo del tabaco. Es, añade, «un impulso a la diversificación agrícola y a la posibilidad de no detener las labranzas de la tierra y aprovechar espacios vacíos. El riego de agua, a partir de bombeo con equipos de petróleo, colonias de abejas meliponas, necesarias en las polinizaciones, y cultura agroecológica, abundan para el desarrollo de los sembradíos », destacó.
Del tabaco, a pesar del período extemporáneo del cultivo, crecen 70 000 posturas y ahorita vendrá la cosecha a corte de cuchilla, los tendales y el acarreo al beneficio con el paso de los días. Desde la mañanita, la capadura y el principal, una «hoja de calidad representa el desvelo de meses de trabajo y aportes para el país », aclaró. De acuerdo con la experiencia del veguero, y a pesar de contar con menor espacio para el beneficio, estima rendimientos aproximados a las 2 t/ha en rama seca, muy cercanos a los alanzados en la temporada anterior.

Con la experiencia veguera de Chaviano Reyes, y ante la avalancha del cultivo de tabaco tapado que existe en la provincia para garantizar de capas la hechura de tabacos dirigidos al mercado exterior, le pregunto sobre una posible dedicación a sembrados de ese tipo. Diferentes razones expone, entre las cuales trasciende que aunque cuenta en las cercanías de abundancia de agua, urge instalar un sistema eléctrico de riego de agua, a lo que se suma la necesidad de reparar la casa de curación, la falta de asignación de la tecnología y hasta la no garantía en la zona de fuerza de trabajo estable.
Por el momento, insiste, «está la reparación de la casa de tabaco, disponer de un sistema eléctrico que dejará atrás el consumo excesivo de petróleo y montar un área de semilleros que ofrezca garantías de posturas, según las variedades escogidas, a los vegueros de las cercanías », entonces, sin duda, comenzarán a fundarse otras palpitaciones en el veguerío.