Este domingo 14 de octubre se cumplen 70 años del nacimiento en Santiago de Cuba de Rodolfo Puente Zamora, uno de los mejores torpederos cubanos en el periodo revolucionario.
Apodado el Chico y también el Jabao, Puente logró mantenerse ininterrumpidamente en las principales selecciones criollas desde el recordado mundial de Santo Domingo,1969, hasta la Copa Intercontinental de Edmonton, 1981.
Recuerdo aquellas polémicas, primero entre quién era mejor si Puente o Agustín Arias. Después, con la entrada de Pedro Jova a las series nacionales se abrió otra nueva interrogante: ¿Puente o Jova?
Claro, años más tarde surgió la que se ha convertido en la más fuerte polémica en torno a la importante posición, porque para la mayoría entre Germán Mesa y Eduardo Paret está el mejor torpedero de las 58 series nacionales.
Volviendo al Chico Puente, hay que señalar que debutó en grande en los campeonatos cubanos. Integró el equipo Habana que en la temporada de 1967-1968 se agenció el gallardete con la cifra récord de 74 sonrisas y él resultó escogido como el Novato del Año, defendiendo la intermedia y el campo corto.
Inmediatamente integró el conjunto menores de 23 años que participó en una serie con varios equipos mexicanos y en 1969 fue llamado al Cuba grande, elenco con el cual se proclamó campeón mundial en ocho ocasiones, la mayor cantidad para un jugador del país en disciplinas colectivas.
No fue un pelotero que se destacara al bate, lo que más resaltaba era su defensa; sin embargo, fue líder de los bateadores en la cita del orbe celebrada en Cuba, en 1971 con 429 y champion bate igualmente en el campeonato nacional de 1979-1980 con 394 de average, además de disparar tres jonrones en un partido en 1970.
El Jabao Puente fue tres veces titular de los Juegos Panamericanos (1971,1975 y 1979), similar cantidad en Juegos Centroamericanos y del Caribe (1970, 1974 y 1978) y en una oportunidad de la Copa Intercontinental (1979), pues en 1981, última ocasión en que vistió la franela del Cuba concluyó con medalla de plata.
Los méritos como pelotero logrados por Rodolfo Puente Zamora le valieron para ser escogido entre los 100 mejores deportistas cubanos del pasado siglo.