Con balance de 2-1 a favor de los actuales campeones nacionales granmenses, el próximo jueves continuará la final de la 61 Serie Nacional de Béisbol, en el estadio de los Cocodrilos de Matanzas.
Una de las claves de Granma para el tercer partido de la gran final de la pelota cubana era sacar tempranamente al abridor. También pasaba por ser un gran reto, pues en la lomita de Matanzas encontraría al hombre más efectivo en las aperturas, Dariel Góngora. El resultado, ya lo conocemos, 100 % de cumplimiento para los Alazanes.
Solo una entrada y dos tercios duró el zurdo yumurino, quien permitió cuatro limpias, le pegaron igual cantidad de jits, dos de ellos extrabases (doble de Yosvani Millán y jonrón de Darién Palma), con un boleto y un ponche. La labor ofensiva de la caballería dio paso a un bullpen que se sabe herido por sus carencias.
En el tercero, tres transferencias y dos incogibles, incluyendo biangular de Yulián Milán, bastaron para cuatro anotaciones, las cuales, definitivamente, abrieron y decidieron el marcador.
Los Cocodrilos, como los Alazanes, llegaron a la disputa por el cetro con el mismo balance de ocho triunfos y un revés. Pero la diferencia para los de la Atenas de Cuba es que lo hicieron con cinco lanzadores, pues ante Las Tunas, en cuartos, y frente a Sancti Spíritus, en semifinales, los abridores cumplieron con más de dos tercios, incluso, Yamichel Pérez, con rutas completas.
Ese es uno de los grandes contrastes en cuanto a posibilidades de éxitos en juegos de este tipo. Cada vez que los matanceros pierdan al que inicia, ganar el choque le sería, para no ser absolutos, casi imposible. Así pasó en el primer cotejo y ayer, en el que el picheo embasó a 18 hombres, de ellos cuatro por bases, dos por pelotazos y otros dos por errores. Muy difícil la tarea de cara al triunfo.
Del lado del equipo que más efectividad ha mostrado en estos partidos de play off en los últimos cinco años, entre otras cosas porque llega muy bien a esa instancia, habría que apuntar que sus lanzadores en estos tres duelos no llegan a tres boletos por partido. Este martes solo poncharon a un rival, pero no bolearon a ninguno. Su ofensiva es su fuerte, la cual mezcla con la velocidad de sus hombres, y la defensa de las mejores de toda la temporada en la tercera victoria fue una galería, con Palma y Alexquemer Sánchez en los jardines y Abreu y Avilés en las esquinas del cuadro. Tarea mucho más fácil si se pretende ganar.
«No podía haber casualidades con la ventaja que teníamos, por eso vino Kelbis Rodríguez en el sexto, sin outs », dijo el mentor ganador Carlos Martí, ratificando su certero pensamiento al ver que, en solo un capítulo, a su abridor le pegaron tres incogibles, la misma cantidad que había recibido en todo el trayecto caminado. «César García abrirá el jueves », aseguró.
En cambio, Armando Ferrer anunció a Yamichel Pérez, si llega a tiempo, tras un trámite de visado que tiene que hacer en La Habana, el mismo día. De lo contrario sería Renner Rivero, a quien no trajo de relevo «porque nunca ha actuado en ese rol ». Preguntado por Andrys Pérez, dijo que no alineó porque su sustituto, Roberto Loredo, se ganó el derecho en este juego ».
Elogió al equipo granmense y dijo que «no pudimos aguantarlo por el descontrol de Naykel Cruz, su principal enemigo, cuando resuelva ese problema será un zurdo muy difícil ».
No solo el play off por la corona está 2-1, sino que ha puesto a Granma en la senda más próxima al título. Este partido era crucial para los dos. Para Matanzas, porque Góngora es referencia de victoria y cada presencia suya es clave; no vencer con él es un golpe duro. Para Granma, por la misma razón, pero, además, y aun más importante, porque ya aseguró llevarse el play off para Bayamo en pos de decidir o llegar allí con su cuarto pergamino. Como si fuera poco, obliga al adversario a ganar tres de cuatro. (Oscar Sánchez Serra)