Dentro de la docena de hombres de pie sobre la duela de la Sala Amistad, Reinaldo Miranda seguramente es el más modesto. Es uno de los entrenadores asistentes de los Lobos de Villa Clara, quienes acaban de finalizar la segunda fase de la Liga Superior con marca de 13 victorias y una sola derrota.
Aunque esconde su crédito detrás del nombre de Carlos Valle, el suyo sobrevuela cada conversación con los jugadores. Junto a Valle y al capitán Andy Boffil, dirige el mejor equipo de baloncesto de Cuba y conoce el motivo de los resultados. Hombre serio y fornido, no descuida un segundo su trabajo mientras conversa con Vanguardia:
«Trabajamos mucho en la defensa. Nada raro, solo ajustar la defensa de zona, las ayudas y el contraataque. Esa es nuestra principal arma », asegura el profesor Miranda ("Carmelo" para muchos) al tiempo que corrige los movimientos del pívot Sergio Machado. «Es cierto que cedemos algunos rebotes ofensivos, pero para contraatacar hay que arriesgar un poco y nosotros optamos por palmear la bola a los que están en el perímetro para una salida rápida y efectiva », asegura.
Sin embargo Andy Boffil, principal anotador del equipo, no es precisamente un velocista. El veterano alero de Caibarién también centra la clave de su juego en la dinámica de equipo: «Lo que más me gusta es la unión que hay », comenta Boffil (35 años). «Siempre tenemos cosas que mejorar, pero yo no creo que haya que preocuparse por nada en particular. Somos un equipo muy completo. Cada cual con su función: el que tiene que anotar, anota y el que tiene que bajar rebotes lo hace y así... », sentencia.
«El propósito inicial era clasificar entre los cuatro y ya lo hicimos. Ahora nos planteamos ganar el campeonato » asegura Carlos Valle, Director Técnico de Los Lobos. Desde que tomó el mando del equipo la temporada pasada, el juego colectivo no ha hecho más que mejorar y los resultados en tan solo dos años invitan pensar en una dinastía.
En esta edición lideran la Liga en porcentaje de tiros de campo colectivo con métricas de 48.9%, acompañado de un desempeño reboteador decente (21.6 rebotes por juego) y una media de 10.5 asistencias por encuentro, de acuerdo con la estadística del sitio www.inder.cu. En defensa, cuatro de sus titulares pelean por el liderato en robos de balón y Yoel Cubillas es el mejor taponador del certamen. Según los propios atletas, el esfuerzo de equipo y los consejos de los entrenadores son la clave detrás de estos números. Aunque existen preocupaciones como la forma física en un calendario apretado.
Boffil sale al paso ante los cuestionamientos sobre el exceso de minutos en cancha para los titulares explicando que se trata de una estrategia de equipo. «Nosotros tratamos de ganar la mayor cantidad de juegos posible en estas primeras dos vueltas para acomodarnos y así fue. Ahora podemos trabajar más esta ronda y preparar más a la banca », explica Andy. Y ambos entrenadores, por su parte, concuerdan en esa idea y añaden que, aunque en partidos como contra Capitalinos la segunda unidad respondió, su aporte no fue el que se esperaba.
«Ellos han mentalizado el hecho de que pueden ganar », explica Miranda, «de ahí el desempeño de jugadores como Osvaldo Pérez, uno de los atletas más completos del torneo, o Marcel Mons, que nos ha dado mucho con su defensa, su ofensiva oportuna y su disciplina. Hay que mejorar los tiros desde el perímetro, todo el equipo, además de aprender a conseguir una ventaja y mantenerla. » concluye el entrenador asistente.
Por su parte, el profesor Carlos Valle invita a la afición a respaldar el trabajo excepcional de estos dos años: «El año pasado vino bastante público a la Sala Amistad, esperamos que este año se repita. Estamos en una posición para hacernos con el título ». Aunque Valle confía en el trabajo de equipo y Boffil en la capacidad de sus Lobos, nadie lo tiene más claro que Reinaldo Miranda, parco para sus logros pero sin límites para elogiar a sus alumnos:
«Ellos ya creen que pueden ganar. Y van a ganar ».