Hace 43 años el equipo femenino de la malla alta alcanzó por primera vez el título mundial, lo cual dio origen al surgimiento del Día del Voleibol en Cuba.
Aquel título mundial de las voleibolistas fue el primero de nuestras féminas en cualquier deporte. (Fotos: Capturas de video)
Osvaldo Rojas Garay
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06 Septiembre 2021
06 Septiembre 2021
hace 3 años
Tomo prestada esta frase de las tantas que creó René Navarro en sus narraciones de voleibol, para recordar que este lunes, 6 de septiembre se cumplen 43 años del primero de los tres títulos mundiales alcanzados por la selección femenina del deporte de la malla alta de Cuba.
Ese formidable triunfo de 1978, primero logrado por cualquier elenco de féminas de la Mayor de las Antillas, dio lugar a que el 6 de septiembre se considere el Día del Voleibol en Cuba, aunque la mayoría de las veces se pasa por alto.
Para adjudicarse la corona en la justa realizada en Leningrado, antigua Unión Soviética, las muchachas bajo el mando del mejor entrenador de equipos femeninos de voleibol del siglo pasado, Eugenio George, batieron a los colectivos de Estados Unidos, Checoslovaquia, Yugoslavia, República Democrática Alemana y Japón (se enfrentaron dos de veces).
En semifinales, doblegaron al poderoso conjunto anfitrión, ante el cual cayeron en el primer parcial 12-15, pero a partir del segundo combinaron la fortaleza del ataque con precisas jugadas de engaño sobre el bloqueo que desconcertaron a sus rivales. Así lograron recuperarse y ganar los tres sets siguientes. Luego, en el partido por el oro les arrebataron el título a las japonesas conocidas como las Niñas Magas del Oriente blanqueándolas en tres tiempos.
Aquel fue el mundial de Mercedes Mamita Pérez, a quien muchos expertos la situaron como la principal figura del certamen. También brillaron Mercedes Pomares. Nelly Barnet, Lucila Urgellés, Imilsis Téllez y Ana María García; estas dos últimas en rol de pasadoras. Fue esa la sexteta regular de un equipo en el cual estuvieron también Erenia Díaz, Ana Ibis Díaz, Maura Alfonso, Sirenia Martínez, Mavis Guilarte y Libertad González.
Otra generación de jugadoras se encargarían de sumar otros dos títulos en lides planetarias, ganados en las ediciones de 1994 y 1998, y tres coronas sucesivas en las Olimpiadas de Barcelona 1992, Atlanta 1996 y Sidney 2000.
Hazaña inédita
El 6 de septiembre de 1978 se concretó una página inédita para el deporte cubano, pues mientras en Leningrado nuestras voleibolistas ganaban el título mundial, en Italia, el conjunto de béisbol a las órdenes de Servio Tulio Borges, se apoderaba por décimo quinta ocasión del cetro planetario.
Conuna desbordada ofensiva, la novena antillana noqueó a Corea del Sur, 11 carreras a cero. De esta manera se escribió una proeza inigualable hasta el momento: dos equipos cubanos se proclamaron campeones mundiales el mismo día.
¡Cómo han pasado los años!, pienso cada vez que reviso la foto que aparece en una revista Bohemia de la época, en la cual se observa a los integrantes de los equipos de voleibol femenino y béisbol descendiendo del avión.
Ninguno de los dos planteles venía con las manos vacías, como ha sucedido en los últimos años. Traían las medallas y los trofeos logrados en los campeonatos del orbe en sus respectivas disciplinas, coincidentemente, ganados el mismo día: 6 de septiembre de 1978.