Medio siglo después que Tony Oliva se proclamó por tercera ocasión campeón de bateo en la historia de las Grandes Ligas, al archivar 337 de average, en 1971, el oriundo de Sancti Spíritus Yulieski Gourriel Castillo se convierte en el segundo cubano en agenciarse ese importante título en las Ligas Mayores.
El mediano de los hermanos Gourriel se coronó champion bate, al compilar 319 vistiendo la franela de los Astros de Houston, de la Liga Americana, para erigirse en el único pelotero de la Mayor de Las Antillas en llevarse el cetro tanto en las Grandes Ligas como en las series nacionales de béisbol, y el primero de los participantes en estos últimos certámenes en liderar a los bateadores en el mejor béisbol del mundo.
Yulieski había comandado la tabla de los bateadores en el campeonato nacional cubano de 2015-2016, cuando luciendo el traje de Industriales promedió 500 de average.
El único cubano que antes de Yulieski había concluido como líder de bateo en las Grandes Ligas fue Pedro Tony Oliva, nativo de la provincia de Pinar del Río, quien comandó ese departamento, tras registrar 323 en 1964. Al año siguiente volvió a encabezar a los bateadores con 321 (en algunos sitios lo sitúan con 323) y seis años más tarde, en 1971, alcanzó su tercer cetro con 337. Todos sus títulos los obtuvo en la Liga Americana, con los Minnesota Twins.